Si hay una estrella fuera de órbita en Hollywood, ese es Joaquin Phoenix. Muchos actores tienen entre sus intereses (o en su programa de marketing) la simpatía activista y el compromiso con los más desfavorecidos. Conocidas son la lucha ecologista de Leonardo DiCaprio o la labor como embajadora de la ONU de Angelina Jolie. En el caso del actor nacido en 1974 Puerto Rico, su solidaridad es para con las vacas.

Y es que estos animales fueron protagonistas en la gala de los Oscar, en su discurso de aceptación del premio la mejor interpretación masculina por su trabajo en Joker, de Todd Phillips. El actor, como muchos y muchas antes, aprovechado el altavoz global que ofrece la gala de los Premios Oscar para lanzar un #MeToo animalista que en el país de los mil millones de cabezas de ganado (exageramos), del steak y la hamburguesa, ha debido de sonar a sacrilegio. Si había alguna duda de por qué el actor bordaba el personaje de villano revolucionario pintado de payaso, quedaba totalmente despejada.

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Joaquin Phoenix nació en el seno de una familia miembro de una secta, Los niños de Dios, y algo de esa entrega absoluta a su trabajo y a sus convicciones parece haber conservado. Ahora, su fe es un veganismo sin dios que lleva poniendo en práctica desde que sus padres lo adoptaron en 1977. Joaquin, que acudió a la gala acompañado de su pareja, la también actriz Rooney Mara, puede que sea la primera estrella vegana de Hollywood, pero no está solo.

Sea por moda o por convicción, en la Meca del Cine, y en California por extensión, el veganismo hace furor y muchos famosos han adoptado también esa práctica como estilo de vida no solo alimentario. Tanto que incluso el menú de los Oscar se ha decidido a incluir esas preparaciones en el catering que se sirve durante la ceremonia a los participantes. Una opción que, desde luego, se han saltado Salma Hayek y Penélope Cruz, con la dieta de Oscar que nunca habrías imaginado.

En el discurso, el actor elevado la voz contra los consumidores de carne y otros derivados animales: "Nos sentimos con derecho a inseminar artificialmente a una vaca y robarle su bebé, pese a que sus gritos de evidente angustia. Después, tomamos la leche que está destinada a su ternero y la echamos en nuestro café y nuestros cereales".

Sabemos que hay multitud de alimentos ricos en proteínas que pueden sustituir a la carne. Y es lo que ha hecho Joaquin Phoenix para celebrar su Oscar. Porque si en tantas películas americanas acabamos viendo a sus protagonistas celebrando cualquier éxito con una visita a la hamburguesería más cercana, es porque es una costumbre tan arraigada como la del pavo relleno de Acción de Gracias. Por eso, no es raro ver al actor y a su pareja celebrando la velada dando un delicioso bocado al plato por excelencia americano (con permiso del hot dog).

Si algo ha quedado claro, es que esas hamburguesas no lo son de carne, sino que forman parte de ese trampantojo vegano en el que cualquier cosa que antes hiciéramos con origen animal ahora podemos comerla sin necesidad de que sacrificar ninguna res. La que están comiendo Joaquin y Rooney son de la cadena vegana angelina Monty's Good Burguer, que cocina este producto de manera artesanal, con ingredientes locales, salsas caseras y garantía de sostenibilidad, porque requiere de un 80% menos de recursos ambientales que la carne animal. Nada que ver con la Impossible Burger vegana de Burger King, por ejemplo...

El estilo de hamburguesas veganas también las encontramos ya en nuestros supermercados y en restaurantes de cualquier ciudad española. Ahora tenemos que educar el gusto para que las prefiramos sobre las originales. Un poco de ficción, vamos.