Carmen Lomana
gtres

Conforme vamos cumpliendo años, nuestra preocupación por el cuidado de la piel va aumentando. Buscamos lucir un rostro firme, relleno, luminoso y nutrido, que nos dé un aspecto de buena cara, descansado y saludable y que, además, nos ayude a disimular las arrugas y las líneas de expresión. Cuando pasamos la barrera de los 50, debemos ser mucho más cuidadosas y conscientes con las formulaciones que nos aplicamos, buscando que tengan los activos necesarios para ayudarnos a lucir con ese efecto juvenil y repulpado y ayudándonos a conseguir una piel mucho más firme. Formulaciones ligeras, que se integren bien con nuestro rostro, no dejen residuos y, sobre todo, que encajen con nuestro tipo de piel.

A la hora de crear esta rutina facial sólida, sin embargo, tan importante son las formulaciones que elegimos como la forma en la que nos las aplicamos porque, si nos echamos las cremas rápido, sin sentido, sin mimo y sin orden, de poco servirá escoger la mejor hidratante porque no va a cumplir el efecto que buscamos conseguir en nuestra piel. Carmen Lomana lo sabe bien y, a su 76 años, luce un cutis perfecto y densificado. Nos cuenta los trucos que debemos seguir a la hora de aplicarnos nuestra rutina nocturna de cuidado facial. ¡Toma nota!

Así debemos aplicarnos la crema facial, según Carmen Lomana

Cuando nos aplicamos la crema en la cara, no solo la estamos hidratando si no que, además de protegerla de la contaminación ambiental y de todos los factores ambientales, creamos una barrera que nutre y calma la dermis, y que también reduce de nuestro rostro la fatiga y los signos de envejecimiento, difuminando arrugas y líneas de expresión. Sin embargo, para que esto ocurra, tan importante es elegir la formulación que mejor le va a nuestro tipo de piel, como aplicar en nuestro rostro la cantidad adecuada de la misma y, sobre todo, hacerlo de forma correcta.

Es vital aplicar bien la crema en la cara porque, con ello, además de asegurarnos de cubrir bien todo el rostro, lograremos que se absorba por él de forma óptima, ayudándonos también a mejorar el tono de nuestra piel. Antes de aplicarla, es vital tener el rostro limpio, después de haberlo purificado con nuestro limpiador de confianza y, aunque la piel debe estar seca a la hora de aplicarla, podemos dejarla un poquito húmeda para que se absorba mejor. Pero, ¿Cómo nos la aplicamos? Carmen Lomana tiene claro que este ritual es esencial para garantizar el cuidado de nuestra piel y nos da algunas pautas para conseguir aplicarnos bien la crema hidratante antes de irnos a dormir.

"Lo primero es quitarse el maquillaje. Yo lo hago con un agua micelar", explica Carmen Lomana, que limpia su piel con la ayuda de una toallita. Después nos indica cómo debemos echarnos la crema: "Calientas la crema con las palmas de las manos (frotando una contra la otra) y la aplicas con movimientos circulares masajeando todo el rostro", aclara. Ella también incide en el cuello, el gran olvidado de las rutinas de cuidado facial. 

Carmen Lomana
Gtres

¿Y cómo se aplica el contorno de ojos?

"Ahora le toca el turno al contorno de ojos", cuenta Lomana. Con él, no solo reduciremos las líneas de expresión de nuestros ojos, también disimularemos las ojeras y deshincharemos las bolsas, logrando lucir una mirada mucho más fresca y descansada, hidratando y nutriendo la piel y mejorando su luminosidad. La socialité se echa un poquito de corrector en el dedo meñique de su mano y lo aplica "sobre los cuatro puntos cardinales del ojo (lagrimal, rabillo, párpado inferior y párpado superior). Se extiende suavemente y se masajea siempre hacia arriba (para levantar la mirada en lo posible), explica Carmen Lomana.

Por último, nos recomienda utilizar un aplicador con forma cilíndrica para aplicarlo de forma más relajante y conseguir que nuestro rostro quede mucho más descansado. Aplicándonos de esta forma las cremas de nuestra rutina de cuidado facial, Carmen Lomana asegura que notaremos "alivio y redensificación de la piel. Os va a parecer un milagro, pero no lo es. Es ciencia", concluye tras recomendarnos su rutina de cuidado facial de Helena Rubinstein, su firma cosmética de cabecera. Y es que, aplicándonos la crema hidratante con el mismo esmero que Carmen Lomana, conseguiremos lucir un rostro firme, nutrido y brillante como el suyo una vez que hemos pasado los 70 años.