Audrey Hepburn: “Uso muchas cremas hidratantes y aceites porque tengo la piel bastante seca. También me aplico yogur en el rostro como mascarilla durante unos 30 minutos"

Pocas figuras de Hollywood han conseguido alcanzar lo que ha logrado Audrey Hepburn. La actriz, con una naturalidad y una elegancia distintivas, sigue siendo recordada décadas después de su fallecimiento, inspirando a cualquier generación con su estilo y belleza. Esto es algo que muy pocas celebrities logran, y es que la esencia de la protagonista de Desayuno con Diamantes sigue igual de viva que en los años 50.

Su apariencia radiante no era fruto de los excesos cosméticos, sino de un enfoque sencillo, constante y adecuado a sus necesidades. Su rutina de belleza, revelada en parte por su hijo Luca Dotti en el libro Audrey at Home: Memories of My Mother’s Kitchen, nos recuerda que el verdadero cuidado surge del amor propio y de saber escuchar lo que nuestra piel necesita. Presta atención, porque hemos descubierto los secretos de la actriz para un cutis radiante (y alguno te sorprenderá).

La importancia de hidratarse bien

Uno de los pilares fundamentales del cuidado de Audrey Hepburn era algo tan básico como subestimado: beber agua. Según Luca, su madre estaba completamente comprometida con hidratarse constantemente a lo largo del día. “Siempre iba con una botella de Evian en la mano”, escribía en su libro.

Esto era algo que ella hacía, incluso cuando no era algo a lo que se le diera tanta importancia como en la actualidad, en gran parte debido a cómo había sido educada. “Ella realmente se preocupaba por beber mucha agua y comer muchas verduras. Era una cuestión de cómo había sido criada”, relataba. Sin duda, es un enfoque que todas deberíamos de tomar, ya que beber agua no solo mejora la salud, sino que tiene un impacto directo en su piel: mucho más fresca, luminosa y naturalmente tersa.

Su piel era seca ¿cómo se la cuidaba?

Además del agua que consumía, Hepburn sabía que su piel seca necesitaba una dosis adicional de nutrición también por fuera. “Uso muchas cremas hidratantes y aceites, porque tengo la piel bastante seca”, confesaba en una entrevista. En estos casos es muy importante escoger productos que contengas activos e ingredientes que favorezcan la retención de agua en la dermis. Algunos más actuales como la niacinamida, el ácido hialurónico o los péptidos son fundamentales si tú también tienes este tipo de tez. 

Aunque, lo que más nos ha llamado la atención, es un truco casero que ella aplicaba para eliminar células muertas y devolver ese glow a la piel, y que no puede ser más curioso. Aplicaba yogur en el rostro, dejándolo actuar durante media hora antes de enjuagarlo. Era yogur griego fresco, el cual contiene ácido láctico que ayuda a exfoliar suavemente e hidratar la piel al mismo tiempo.

Este truco puede parecer algo inusual, pero en un mundo saturado de fórmulas químicas e ingredientes agresivos, Audrey abogaba por lo natural, lo fresco, lo accesible. Y es que a veces los mejores cosméticos pueden estar dentro de tu nevera. Su piel no es solo el reflejo de una buena genética, que es cierto que influye, sino de un autonocimiento estudiado y que verdaderamente funciona.

Siempre se desmaquillaba

La actriz siempre ha tenido presente la importancia de cuidarse a nivel cutáneo. Esto fue impulsado en parte por el legendario dermatólogo húngaro Erno Laszlo, quien también trataba a otras actrices de la época como Marilyn Monroe, Grace Kelly y Ava Gardner. "Le debo el 50 % de mi belleza a mi madre, y el otro 50 % a Erno Laszlo”, declaró en una ocasión.

La filosofía de Laszlo, centrada en la limpieza, la hidratación y la consistencia, encajaba perfectamente con el estilo sobrio de Audrey. Algunos de sus productos formaban parte de su rutina diaria, aunque ella misma se definía como “una chica de agua y jabón”, fiel a la sencillez que la caracterizaba.

Después de largos días de rodaje o eventos glamurosos, jamás se iba a la cama sin realizar ese paso fundamental en toda rutina de skincare: desmaquillarse por completo. “Trabajando en el teatro, he visto lo que puede hacerle a la piel no quitarse bien el maquillaje, así que soy muy cuidadosa con eso”, aseguraba la actriz.

Aunque en la actualidad el uso de jabón en el rostro ha sido desplazado por fórmulas más suaves, el objetivo sigue siendo el mismo: limpiar bien la piel antes de irnos a dormir. Si esto es algo que no estás a haciendo, déjanos decirte que es la base para conseguir una piel luminosa y saludable. Audrey no necesitaba ostentaciones para brillar, ni artificios en el cuidado. Su legado ha sido la belleza equilibrada, consciente, y guiada por la moderación