Seguro que has escuchado hablar más de una vez de la dieta proteica o alguien te ha contado que ha adelgazado con ayuda de esta dieta. Si estás pensando en ponerte a régimen y quieres darle una oportunidad a esta dieta basada en el consumo de proteínas, no te lances a suprimir los carbohidratos del menú porque podría ser peligroso.
La dieta proteinada no es fácil de seguir por cuenta propia y –como en cualquier otro plan nutricional– es recomendable acudir a un especialista en nutrición para que nos diseñe un plan acorde con nuestra salud y expectativas. Nosotras hemos hablado con la dietista y nutricionista Elisa Escorihuela y con el farmacéutico experto en nutrición Eduardo Senante para que nos resuelva todas las dudas.
Dieta proteica : Qué es, cuáles son sus beneficios y riesgos y un menú para aplicarla
Una dieta proteica, hiperproteica o alta en proteínas es aquella en la que "se aumenta de manera estratégica el porcentaje de proteínas de la alimentación en detrimento de otros macronutrientes como lípidos y los hidratos de carbono", nos explica la nutricionista.
Dentro de este concepto podemos encontrar varias vertientes: aquellas en la que la alimentación se personaliza por un nutricionista y que después de haber estudiado el caso y de acuerdo con el paciente se plantea este tipo de estrategia. "Hoy en día podemos encontrar cientos de fórmulas que a base de batidos, formulan tu alimentación, ya sea completa o parcial", señala Elisa Escorihuela.
Para quiénes está recomendada la dieta de las proteínas
No es una dieta recomendada para todo el mundo. "Las dietas altas en proteínas se pueden recomendar en casos en los que la pérdida de peso se resiste, en deportistas entrenados (nutricionalmente hablando) y en algunos casos de diabetes tipo II", aclara la nutricionista.
Eduardo Senante, añade: "la dieta proteica tiene varios beneficios reconocidos, pero entre ellos el más importante es su efecto saciante, ya que se ha demostrado en múltiples estudios que una dieta alta en proteínas produce mayor saciedad lo cual es beneficioso para la pérdida de peso. Por otra parte una dieta proteica nos va a ayudar a prevenir la sarcopenia, es decir, nos va a ayudar a prevenir la pérdida de masa muscular, que es el tejido metabólicamente activo y el que nos interesa mantener", explica.
Qué se puede comer en la dieta proteica
- Carnes que tengan poca grasa, pescados ligeros, jamón de pavo y huevos.
- Los lácteos serán tus aliados: leche en su versión desnatada, quesos blancos bajos en grasas y yogur desnatado.
- En cuento a las verduras, podrás comer sin problema: acelga, coles, espinaca, lechuga, rúcula, berro, achicoria, zanahoria, repollo, tomate, pepino, rábano, berenjena, chayota, repollo, col de bruselas, brócoli, coliflor, alcachofa, cebolla, ajo y espárragos. El aceite de olvida tampoco será un problema.
- Los frutos secos están permitidos: cacahuates, nueces, almendras, avellanas o nuez de brasil están permitidas.
Alimentos a evitar en la dieta proteica
Los alimentos a evitar dentro de una dieta proteica incluirán carbohidratos como los cereales, el pan, las legumbres, la pasta, el arroz, los tubérculos y todos lo alimentos que contengan azúcar como la fruta y los ultraprocesados.
Ejemplo de un menú en la dieta proteica
Si te sientes hinchada o necesitas bajar volumen para un evento especial, puedes probar a hacer un día de dieta proteinada. Elisa Escorihuela nos da las pautas.
Desayuno: Café con leche descremada con una tortilla de espinacas.
Media mañana: 30 gramos de frutos secos.
Comida: Salteado de pollo con verduras y fruta de postre.
Merienda: Queso fresco.
Cena: Salmón a la plancha con brócoli al vapor y un yogur natural.
Una dieta puntual
Según Elisa Escorihuela mantener una dieta alta en proteínas en el tiempo es bastante complicado. Primero por nuestra cultura mediterránea, "en ella, predominan las legumbres (que aunque son una fuente de proteínas de origen vegetal, también son fuente de hidratos de carbono), el arroz, el pan, las frutas y las hortalizas". Y segundo porque si no existe ningún tipo de patología, lo ideal es consumir todos los grupos de alimentos.
"De ellos obtendremos los nutrientes necesarios para mantener nuestras necesidades sin enfermar", explica Elisa que nos advierte de que "mantener la dieta proteinada a largo plazo "puede acarrear problemas de salud, sobre todo cuando no está bien planteada ya que podemos sufrir carencias nutricionales".
En cuanto a las dietas proteinadas a base de batidos, la experta no se muestra a favor ya que nos explica que "puede haber pérdida de masa muscular y pasar factura a nuestros riñones. Por eso muchas de ellas requieren de seguimiento médico. Hay que ser muy cauteloso y no tomarse a la ligera la alimentación".
Riesgos a largo plazo de la dieta proteica
Por supuesto, una alimentación llevada a los extremos puede conllevar riesgos. Estos son algunos de los que nos advierte la experta en nutrición:
- Cefaleas y migrañas por la falta de azúcares.
- Cansancio, general y muscular.
- Ansiedad.
- Problemas de sueño.
- Mareos.
- Mal aliento.
- Además de problemas renales, a nivel cardiovascular o renal.
Si vas a hacer una dieta proteica debes tener en cuenta..
Como siempre, lo más importante es ir a un profesional que te ayude con la dieta y más si es de este estilo porque puede conllevar un riesgo para la salud. La nutricionista nos cuenta que "hoy en día no nos sorprende ver en supermercados estanterías con batidos sustitutivos de comidas que se toman a diestro y siniestro sin tener en cuenta las necesidades de cada persona". Recuerda que nuestra salud es nuestro bien más preciado y por eso debemos cuidarla con mimo.