Natalie Portman_Perfumes
Gtres

El universo del perfume es una de las parcelas más íntimas de nuestro ritual de belleza: pocas cosas resultan tan personales como el rastro olfativo que decidimos dejar al pasar. Un solo spray puede transportarnos a un recuerdo de infancia, a una tarde de verano en la costa o al abrazo de alguien que amamos. Y, aceptémoslo, ¿quién no ha espolvoreado su fragancia fetiche en un día gris para levantar el ánimo al instante? Se trata de un gesto pequeño, sí, pero con un poder enorme.

Lo saben bien las grandes maisons, que año tras año siguen la pista a las corrientes olfativas con la misma atención con la que los diseñadores observan las pasarelas. Venimos de un boom de esencias gourmand y orientales (esos perfumes que huelen a todo un postre), pero las familias florales y afrutadas jamás han abandonado el trono. Hay devotas que, sencillamente, “no serían ellas mismas” sin el eco del nardo o la rosa de Damasco deslizándose por su piel.

Natalie Portman_Perfumes
Gtres

No es casualidad que, con la subida de las temperaturas, nuestro cerebro pida a gritos el frescor de los cítricos o la ligereza de un bouquet de flores recién cortadas. En esos días de calor extremo, un perfume pesado puede sentirse casi como un abrigo de paño en pleno agosto. Otras, sin embargo, abrazan esas notas etéreas todo el año porque las reconfortan y definen su firma olfativa. Natalie Portman pertenece a este último grupo. En la conversación que mantuvo con Vogue México y Latinoamérica, la actriz reveló que sus momentos de bienestar están íntimamente ligados a fragancias de azahar, nardo y jazmín, tanto en perfumes como en velas e inciensos. 

 

Tendencias olfativas 2025: la hoja de ruta para tu próximo flechazo

Aunque cueste creerlo, el perfume también se rige por modas. Hay incondicionales de Chanel N°5 o Baccarat Rouge 540 que jamás cambiarán de compañero aromático —la personalidad que destilan esos frascos es difícil de sustituir—, pero el resto de las beauty lovers se lanzan cada temporada a descubrir nuevas fórmulas. ¿Qué nos depara 2025?

  •  Frutos rojos (y compañía): las notas de frambuesa, cereza o arándano que invadieron 2024 continúan, pero se cuelan matices de albaricoque y melocotón. El resultado es un acorde dulce, jugoso y chispeante que hace la boca agua.
Lovefest Burning Cherry
Kayali

 

  •  Cítricos con giro oriental: la frescura del limón o la bergamota sigue siendo infalible para el calor, pero 2025 introduce el yuzu, el cítrico japonés que ya conquistó la gastronomía. Aporta un punto exótico y casi efervescente que dinamiza la clásica “agua de colonia” y la convierte en alta perfumería.
Aqua Allegoria
Guerlain
  • Gourmand comestible 2.0: la fiebre por los postres embotellados no se ha extinguido. Después del icónico Candy de Prada, vuelven los acordes de caramelo, miel y malvavisco. Sí, son “empalagosos”, pero su dulzor se matiza con salidas verdes o especiadas para que no resulten pesados ni siquiera a 36 °C.
Candy
Prada
  • Florales con trasfondo amaderado: la incorporación de vetiver, cedro o sándalo en fragancias femeninas dibuja un contraste sofisticado. Imagínate una base terrosa, un corazón de peonías y un guiño cítrico inicial; un triángulo perfecto para quienes quieren huir de la dulcería sin renunciar a la feminidad. Amantes del nardo, Narciso Rodríguez For Her sigue siendo biblia; para las que prefieren “llevar un ramo fresco” sobre la ropa, Miss Dior continúa reinando; y si lo tuyo son las amapolas, Kenzo te seguirá acompañando.
Miss Dior
Dior

El perfume en la rutina de bienestar de Natalie

Para Natalie Portman, el perfume no es un accesorio más; es parte de un ecosistema de hábitos que la mantienen equilibrada por dentro y por fuera. Lleva una década comprometida con el veganismo, medita en los descansos de rodaje y cambia el scroll infinito por sesiones de running o yoga siempre que puede. Dentro de ese mosaico de cuidados, encender una vela de jazmín o perfumarse con un acorde de azahar es casi un mantra más. 

Ese enfoque holístico ha impulsado la popularidad de la aromaterapia contemporánea: difusores eléctricos que transforman el salón en un spa, brumas de almohada que prometen un sueño reparador o cerillas perfumadas para acompañar tu baño dominical. Firmas como Diptyque, Jo Malone o Byredo han dejado de ser una “moda instagramera” para convertirse en aliados de bienestar tan válidos como una clase de Pilates.

Aromas que hablan de ti

La firma olfativa es, quizá, el accesorio invisible más potente: proyecta antes que un labial rojo y perdura más que unos stilettos de edición limitada. Puedes cambiar de bolso o de blazer, pero cuando alguien reconoce tu perfume antes de verte, has creado una huella inolvidable. Natalie Portman lo ejemplifica: su carrera, su activismo y su elegancia tranquila confluyen en esa tríada de flores blancas que la definen, en una mezcla tan sencilla como sofisticada.

En este momento donde el bienestar se confunde a menudo con la lista interminable de súper alimentos o gadgets tecnológicos, detenerse a oler una vela de jazmín, o regalarte un layering capaz de elevar tu estado de ánimo, es un recordatorio de que el lujo auténtico cabe en un frasco de 50 ml. Así que, la próxima vez que busques un impulso instantáneo, sigue el consejo no escrito de Natalie: rocía tu piel de azahar, inhala profundo y deja que la vida huela —literalmente— a flores. Porque, al final, un perfume es mucho más que una fórmula; es una declaración de quién eres hoy y de la huella que quieres dejar mañana.