Isabel Preysler (74 años): “Empecé desde muy joven a cuidar mi piel para mantenerla luminosa, hidratada y firme lo máximo posible. Es más fácil mantener la estructura que revertir un tejido caído.”

"Más vale prevenir que curar" es un dicho que hemos escuchado toda la vida y que puede aplicarse a distintos ámbitos, incluido el de la belleza. Y es que, en este terreno, siempre es mejor tomar las riendas de la salud de nuestra piel antes de que sea demasiado tarde, especialmente si hablamos de envejecimiento.

Isabel Preysler lo sabe bien y, por ello, la socialité ha tratado desde que es joven evitar la aparición de arrugas y de líneas de expresión. Parece que le ha causado efecto, pues, a sus 74 años, sigue luciendo un rostro terso y radiante, que es la envidia de cualquiera a su edad.

"Empecé desde muy joven a cuidar mi piel con el objetivo de mantenerla luminosa, hidratada y firme el máximo tiempo posible", confesó a sus seguidores en su perfil de Instagram. El cuidado de la piel es algo que en múltiples ocasiones ha afirmado haber aprendido viendo a su madre y que ella misma ha transmitido a sus hijas, Tamara Falcó, Ana Boyer y Chábeli Iglesias

Isabel Preysler siempre le ha dado mucha importancia a su rutina de skincare. "Es más fácil mantener la estructura, la densidad y la hidratación natural que revertir un tejido caído. La prevención, es este caso, es una buenísima decisión", añadió en su publicación. Hoy, te traemos algunos de sus mejores secretos para mantener la piel llena de vida a pesar del paso de los años.

La vitamina C, su mejor aliada

La vitamina C ha pasado a ser en los últimos años uno de los ingredientes más populares en las rutinas de cuidado de la piel. Es un activo muy eficaz a la hora de prevenir las arrugas y suavizar las líneas de expresión, pero también reduciendo las manchas y aportando una mayor luminosidad a nuestro rostro.

"La vitamina C es un potente antioxidante que contribuye a que las células luchen contra los radicales libres que causan el envejecimiento de la piel", escribía Preysler en su cuenta de Instagram, dándonos a entender que este ingrediente es un indispensable dentro de su rutina diaria.

Resulta muy efectiva para potenciar la firmeza y la elasticidad de la dermis, al estimular la producción de colágeno.

Una dieta sana y rica en nutrientes antioxidantes

Más allá de los productos que aplica en su rostro, la socialité no pasa por alto la importancia de la dieta. De hecho, en numerosas ocasiones ha mencionado cómo incorpora la vitamina C en ella. "Incorpora a tu dieta vitaminas C que nos ayudan a frenar los radicales libres (‘culpables’ del envejecimiento prematuro de la piel). Son ricos en esta vitamina el pomelo, kiwi, mandarina o las fresas", explica.

Así, se lleva una función antioxidante desde dentro, además de disminuir la inflamación y favorecer la cicatrización, lo cual viene muy bien si tenemos marcas o cicatrices de acné.

Una de sus formas favoritas de incluir frutas y verduras en su dieta es a través de batidos saludables. Entre sus recetas, encontramos uno de sus smoothies verdes detox preferidos, que, entre otros ingredientes, incluye brócoli, col rizada, zumo de lima, manzana verde pepino o espinacas.

También suele tomar el agua de Jamaica, una bebida diurética a base de hibiscos, que le ayuda a bajar el hinchazón de los ojos por la mañana, a reducir la inflamación y a mejorar la digestión, considerando este uno de sus mejores secretos de belleza.

Todo ello le ayuda con la hidratación desde dentro, otro factor clave a la hora de retrasar el envejecimiento de la piel. Es fundamental para mantener la elasticidad, para conservar nuestro glow, además de reforzar la barrera cutánea.

La limpieza: un paso que nunca se salta

Isabel Preysler no es el primer icono de belleza que resalta la importancia de una buena limpieza. Otras como Jennifer Lopez o Michelle Pfeiffer han declarado en más de una ocasión que es un paso fundamental para que nuestra piel se vea joven.

"El secreto para mantener un rostro radiante y saludable es cuidar la piel con regularidad, sin olvidarnos nunca de la limpieza", declara Preysler, quien recomienda hacerlo justo antes de usar un exfoliante. Como tip extra, sugiere dejar la piel húmeda para extender mejor el producto y eliminar mucho mejor las células muertas.