Carolina Herrera, (86 años): "Las marcas como Zara que en ocasiones replican lo que hacemos me parecen fabulosas porque tienen la capacidad de llegar a todo el mundo"

En la industria de la moda estética, donde las tendencias son cada vez más efímeras y cambiantes, destacan iconos de estilo como Carolina Herrera. A sus más de 80 años, la diseñadora venezolana es el mejor ejemplo de sofisticación y coherencia, quien ha sabido mantenerse afín a su esencia desde sus inicios.

A día de hoy es una de las firmas más conocidas a nivel mundial, desfilando en las grandes pasarelas y vistiendo a las celebrities más importantes, desde Michelle Obama, a Nicole Kidman o Meghan Markle. En una entrevista reciente habló no solo de su trayectoria, sino de un tema controvertido: el fast fashion. Lejos de criticarlo, ve las ventajas que esto puede ofrecer, democratizando el estilo sin traicionarlo.

Moda accesible sí, pero con distinciones

Carolina Herrera no sólo aplaude la accesibilidad de marcas como Zara, sino que introduce una matización fundamental: “Incluso si eres mayor puedes comprar allí, pero tienes que saber qué te sienta bien”. Esto surge en un momento en el que las microtendencias no paran de aumentar, recordando que no todo se basa en lo que está de moda, sino en conocerse a una misma.

“No creo en las tendencias. Hacen que parezcas una copia más. Todas con el mismo abrigo acolchado negro, o con la misma falda, aunque no tengan piernas para lucirla. Con la moda hay que tener individualidad”, afirmaba en una entrevista en Daily Mail UK. Para ella el estilo no depende de la edad ni del presupuesto, sino de la actitud y del buen juicio. Hay que derribar el mito de que para vestir bien hay que tener un gran presupuesto, ya que cada vez hay más opciones que se adaptan a nuestros bolsillos, manteniendo la calidad y el diseño.

Vestir con elegancia, la esencia de Cariolina Herrera

Lejos de caer en el elitismo, la diseñadora sabe que el fast fashion ha transformado las reglas del juego. Y no lo rechaza. Al contrario: reconoce su influencia y su papel democrático en el diseño. “Todas esas tiendas como Zara que están copiando lo que hacemos para las masas me parecen fabulosas, porque llegan a todo el mundo”, decía la diseñadora.

Para ella las marcas masivas no son el enemigo, sino que el verdadero problema es la falta de criterio personal. “No tiene nada que ver con la belleza ni con el dinero. Hay mujeres que se gastan miles de libras y no se ven elegantes en absoluto, y luego ves a otra con un vestido cualquiera y simplemente lo tiene”, continuaba.

Hasta ella, considerada la “emperatriz de la elegancia” también consume fast fashion. “Sí, por supuesto. Si veo algo que me gusta en Zara o en cualquiera de esas tiendas, lo compro. Me gusta mezclar”, remataba. Y esta es la mejor prueba de que la percha es lo que realmente importa.

El estilo después de los 50

“Nada envejece más a una mujer que pretender que es joven”, sentencia Herrera, con la autoridad que se ha ganado dentro de la industria. Su visión del envejecimiento es clara: hay que hacerlo con gracia, sin forzar una imagen que ya no nos pertenece. “Veo muchas mujeres en la calle que, de espaldas, lucen bien con su cabello largo y sus faldas cortas. Pero cuando se dan la vuelta —¡ay, Dios mío! ¡Son ancianas!”.

Pero, lejos de ser una crítica o cruel, su declaración apunta a una verdad incómoda: muchas mujeres continúan sintiendo esa presión por seguir pareciendo jóvenes, cuando lo verdaderamente revolucionario es aceptar la edad y vestir de acuerdo con ella, sin tener que renunciar al estilo. “La elegancia es una combinación de muchas cosas: no solo lo que llevas puesto, sino también cómo te comportas. Es una cuestión de actitud”, finalizaba.

La guía de estilo de Carolina Herrera para vestir bien

A lo largo de su carrera, Carolina ha ido afinando un manual no escrito que muchas mujeres toman como inspiración. Y aunque su estilo es inconfundible (el uso de las camisas blancas, los pendientes maxi y los cinturones que dibujan la silueta), sus recomendaciones trascienden el armario:

1. Conócete a ti misma: La moda tiene que ver con la individualidad. No se trata de vestirse como todas, sino como una misma.
2. Invierte en un espejo de cuerpo entero: Es el mejor estilista que puedes tener en casa.
3. Evita enseñar demasiado: Lo sexy no está en mostrar, sino en sugerir. La vulgaridad mata la elegancia.
4. Nunca subestimes el poder de una camisa blanca: Es su uniforme. Funciona a cualquier edad y en cualquier ocasión.
5. Las joyas deben iluminar, no recargar: Unos pendientes o un collar pueden transformar un look sencillo en inolvidable.
6. El cabello también habla: A cierta edad, el cabello largo rara vez favorece. El corte correcto puede rejuvenecer más que una crema.

Después de pasar los 80, la diseñadora sigue siendo todo un referente de estilo y una inspiración para muchas. No busca parecer otra, sino que ha encontrado lo que a ella le sienta bien y le favorece en todos los aspectos (algo muy complicado). Porque no se trata de lo que llevas, sino de cómo lo llevas.