¿Eres de las que siempre practica los mismos ejercicios de siempre y no notas resultados? La gran mayoría de veces este fenómeno se debe a que no estamos realizando los ejercicios de manera correcta ni nuestra rutina deportiva está adaptada a nuestra condición física.
Si has superado los 50, esto debería de importante, puesto que, con una rutina profesional, podemos evitar lesiones y dolores musculares (típicos de cuando empezamos a ir al gym). Y no solo eso... Para el poco rato que seguramente tengas para hacer deporte, ¿qué mejor que hacerlo de la manera que de verdad te dé resultados de verdad?
Hemos acudido a la entrenadora personal Paula Butragueño, más conocida en las redes como @pau_inspirafit por sus vídeos de rutinas de ejercicios y recomendaciones, para conocer cuáles son los ejercicios en los que debemos de enfocarnos cuando cumplimos 50 años y queremos notar nuestro cuerpo fuerte, tonificado y mejor que nunca.
¿Cuáles son los mejores ejercicios a partir de los 50?
Paula Butragueño
La entrenadora personal no tiene dudas, si hay que elegir entre un ejercicio para practicar a los 50 es el puente de glúteo. "Es un ejercicio perfecto para esta etapa: fortalece glúteos, zona lumbar y abdomen, tres áreas fundamentales para mantener la postura, la movilidad y prevenir dolores de espalda. Además, es seguro para las articulaciones y tiene efectos hormonales positivos, especialmente importantes para una mujer de 50 años o más", explica.
A nivel muscular, este ejercicio estimula la liberación de hormonas anabólicas, las de construcción. "Al activar grupos musculares grandes (glúteos, isquiotibiales, core), el cuerpo responde liberando cantidades de testosterona y hormona del crecimiento. Esto ayuda a conservar la masa muscular y reducir la grasa corporal". Y añade: "Esto es algo vital durante la menopausia cuando las hormonas tienden a la acumulación de grasa".
Si además te preocupa el estado de tu suelo pélvico por la menopausia y sus consecuencias como la debilidad, la pérdida de elasticidad o los cambios en la uretra, este ejercicio de fuerza ayuda a fortalecer el suelo pélvico. "Al activar la musculatura profunda de la pelvis, el puente de glúteo ayuda a prevenir o mejorar incontinencias urinarias leves, algo que puede empeorar con la disminución de los estrógenos".
También funcionan muy bien si buscamos tonificar nuestro cuerpo y ganar músculo, las sentadillas con press de hombros o el peso muerto con remo. Como dice la entrenadora, estos ejercicios no solo te ayudarán a verte bien, sino que al ser funcionales, facilitarán los movimientos de tu día a día:
- Sentadillas con press de hombros: "Combina fuerza de piernas y tren superior, mejorando el equilibrio, la coordinación y la resistencia muscular", apunta.
- Peso muerto con remo: "Trabaja toda la cadena posterior y fortalece los brazos, lo que ayuda a sostener la postura y las cargas cotidianas", explica.
Si realmente queremos conseguir un cuerpo más fuerte y sano, la clave está en la constancia y disciplina. Paula Butragueño recomienda "entrenar fuerza a partir de los 50 años de 2 a 3 veces por semana. Dejar siempre al menos un día de descanso entre sesiones para que el músculo pueda recuperarse y fortalecerse".
Beneficios de realizar ejercicios de fuerza a los 50
@jlo
Por supuesto, notarás como tu cuerpo está en forma, te sentirás mucho más activa y verás aquellas zonas que tanto maldices por la flacidez, más tonificadas. Pero los beneficios son muchos más (y a todos los niveles). "Entrenar fuerza no solo transforma el cuerpo, sino que también ayuda a suavizar muchos síntomas emocionales y físicos de la menopausia", explica.
- Prevención de la sarcopenia: "Contribuye a la prevención de la pérdida de masa muscular relacionada con la edad y que es uno de los principales enemigos de la mujer".
- Mejora la densidad ósea, reduciendo el riesgo de la osteoporosis.
- Acelera el metabolismo. "Esto facilita el control del peso corporal", añade.
- Mejora del equilibrio y la estabilidad, disminuyendo el riesgo de caídas.
- Se reducen dolores articulares y fortalece la postura.
- Mejora del equilibrio de las hormonas del bienestar, como la serotonina y las endorfinas, ayudando a combatir síntomas de ansiedad, depresión y cambios de humor.
- Eleva la autoestima y la motivación.
Además, a corto plazo (1 a 3 meses), notarás "más energía y vitalidad, mayor facilidad para moverte y mejor postura y estabilidad". Conforme pasen los 6 meses, también verás una "tonificación notable en brazos, piernas y abdomen, disminución de grasa corporal, huesos más fuertes y mayor sensación de juventud y confianza".
¿Por dónde empezar con las rutinas de fuerza?
Paula Butragueño
Los primeros pasos para comenzar a practicar ejercicios de fuerza deben tenerse en cuenta, puesto que sino se puede caer en lesiones y daños musculares. "Se debe consultar con un médico si hay condiciones preexistentes (como hipertensión, artritis o problemas de espalda), empezar con pesos ligeros y mucha atención a la técnica, escuchar el cuerpo y detenerse ante cualquier dolor agudo y calentar antes de entrenar y estirar después para evitar lesiones", enumera Butragueño.
La entrenadora resalta que el truco más importante a la hora de empezar es tener un plan claro y adaptado a tu etapa de vida. "No se trata solo de entrenar por entrenar, sino de seguir una estructura que respete tu cuerpo, tus necesidades hormonales y tu ritmo de recuperación".
Tal y como indica Paula Butragueño, lo prioritario es la constancia antes que la intensidad. "Mejor entrenar de manera moderada y sostenida que querer hacer mucho en poco tiempo", indica. Asimismo, es importante focalizarse por completo en la técnica: "cuidar cada movimiento para proteger las articulaciones y optimizar los beneficios", recomienda la preparadora física.
Apóyate en tu respiración consciente, ya que al exhalar sin contener el aire, ayuda a mejorar la fuerza y a proteger el core. "Celebra cada pequeño logro, porque cada repetación cuenta en ese camino de bienestar".
La entrenadora recomienda que, al comenzar, cuentes con una guía profesional y no lo hagas sola. Por ejemplo, como el programa Phi Fuerza Mujer 40+. "Es un plan diseñado para mujeres de 40 años o más, marca toda la diferencia: te ayuda a avanzar con seguridad, motivación y resultados reales", asegura.