Bea Canzobre, farmacéutica: "Aunque mucha gente crea que no, los cosméticos sí caducan y pueden perder eficacia, provocar alergias, irritaciones e infecciones bacterianas"

Entre las muchas malas prácticas que hacemos con nuestras rutinas de cuidado facial y maquillaje hay una que destaca por ser muy común y no por ello menos importante. No miramos la caducidad de nuestros productos cosméticos. Aunque lo hacemos constantemente con los yogures, las lonchas de pavo o el queso, no le damos la misma importancia a lo que aplicamos en nuestra piel y parece no "importarnos" que no esté en condiciones o que su fecha de consumo preferente ya haya pasado. 

Principalmente es una cuestión de hábitos. Muchos creen que los cosméticos, si no los abrimos, no caducan. Otras personas ni se lo plantean en cualquiera de los casos -abiertos o cerrados-. Sin embargo, los cosméticos sí que caducan y pueden generar problemas cutáneos además de no ser eficaces.

Nos lo explica la farmacéutica experta en dermocosmética Bea Canzobre en un post en su perfil de Instagram (@soybeacanzobre): "Aunque mucha gente crea que no, los cosméticos sí caducan y pueden perder eficacia, provocar alergias, irritaciones e incluso infecciones bacterianas". 

Si guardas botes cerrados desde hace años en el tocador o en el fondo de un cajón esperando el momento oportuno... Lo mejor será que revises su fecha de caducidad antes de usarlos. "Los productos que usamos en nuestra rutina de skincare tienen una vida útil y es importante estar atentos a ello para asegurarnos de que sigan siendo efectivos y seguros para nuestra piel", asegura. "Si el bote que tienes está abierto desde hace siglos, mejor tíralo, tu piel te lo agradecerá", asegura.

Dónde viene la fecha de caducidad de los cosméticos 

Bea Canzobre explica que la mayoría de los productos vienen con un símbolo de tarro abierto con un número. Este nos indica durante cuántos meses es seguro usarlos después de abrirlo (6, 9, 12...).

Estos datos están regulador por la Unión Europea. “El símbolo del tarro abierto se llama PAO y suele tener escrito un número de meses que hace alusión a un máximo tiempo de la fórmula desde que la estrenemos de seis o doce meses, aunque puede alcanzar hasta los treinta y seis meses”, apunta Raquel González, que es cosmetóloga y creadora de la marca Byoode.

Es decir, si tú estás tan feliz porque tu mascarilla o tu exfoliante llevan contigo desde 2023 porque cunden mucho, pero tienen un PAO de doce meses, debes tirarlo, ya que “implica que la fórmula puede haberse desestabilizado y producir efectos adversos en nuestra piel, por ejemplo, porque se haya oxidado”, añade Mireia Fernández, directora dermocosmética de Boutijour. 

Hay que tener en cuenta, además del PAO, que la cantidad de producto y las instrucciones de uso de cada fabricante van intrínsecamente ligadas. “Las instrucciones de uso recomiendan la cantidad de producto y tiempos de aplicación, normalmente, para asegurar que habremos consumido el cosmético antes de que pase su fecha límite de estabilidad”, dice Isabel Reverte, directora dermocosmética de Ambari.

Pero, ¿y si no encontramos dato alguno? Tranquila, puede suceder. Cuando un cosmético no incluye la fecha de caducidad, es porque su caducidad es superior a 30 meses. Si pasa esta frontera de tiempo, la Unión Europea no exige especificar la fecha porque se sobreentiende que el producto se habrá consumido para entonces. La media de uso de un cosmético, aplicándolo de forma continuada, es de tres a seis meses. 

¿Qué pasa si usas productos caducados?

"Con el paso del tiempo, los ingredientes pierden eficacia y pueden generar reacciones en la piel, como irritaciones o infecciones. Además, los productos pueden contaminarse y alterar su textura, olor y color", asegura la farmacéutica. 

No te la juegues nunca con los protectores solares. “Debemos tener especial atención con los productos solares, ya que los filtros, pasado el tiempo, no cumplirán el mismo efecto. Si ha superado el tiempo de PAO o caducidad, es mejor no usarlo. Debemos pensar que los productos con SPF deben usarse con generosidad para proteger bien y que, además, deberían reaplicarse, lo cual acelera el consumo”, añaden desde Byoode. Así que, si has guardado las cremas solares del año pasado revisa su PAO y recuerda bien en qué momento del verano las abriste para saber si puedes o no aprovecharlas este año. 

Tip sencillo para que no se te pase la fecha 

Asegúrate de revisar la fecha de caducidad de tus productos que usas a diario. El truco ideal para usarlo siempre de forma segura con tu piel y para tener una máxima eficacia es anotar  en el envase la fecha de apertura e incluso la de vencimiento (lo sabrás por el símbolo del tarrito con los meses). 

¿Podemos prolongar la vida útil de los cosméticos? 

Para mantenerlos en buen estado estos dos puntos son clave: 

• Cierra bien los envases después de cada uso para evitar la exposición al aire.
• Guarda los productos en un lugar fresco y seco, lejos del sol y la humedad.