Estoy entrenando con Ring Fit Adventure para Nintendo Switch. ¿Quieres saber por qué debes probarlo tú?

Lo primero es colocar los mandos o Joy-con: Uno en el aro o ring, que hace las veces de un dispositivo electrónico capaz de detectar los movimientos de la parte superior del cuerpo y reaccionar a ellos. Lo bueno es que se adapta a tu forma física y va incrementando su exigencia según vas superando retos. El mando rojo se coloca en el Ring-con, de forma que en lugar de apretar botones, se trabaja sobre el aro presionándolo para avanzar, y de paso haciendo ejercicio.

Seguidamente se inserta el mando azul en la cinta. Y ésta se coloca en la pierna izquierda para detectar los movimientos del tren inferior.

Empiezo con el capítulo 1, Primaterra: la idea es avanzar por unas tierras desconocidas para lo cual tengo que correr en el sitio o elevando las piernas. En el modo Aventura, Primaterra te lleva a un trote suave (elijo un modo sin dificultad, no se trata de darlo todo en el segundo uno). En algunos tramos he de subir escaleras y para ello elevar las piernas en mi sitio… el cambio de ritmo y ejercicio incrementa mi ritmo cardíaco. El juego te guía como un entrenador personal a la hora de hacer los movimientos correctamente. Después de cada juego, puedes ver cómo está tu pulso y cuántas calorías has quemado.

Una vez le he puesto el check a mi sesión de cardio, le toca el turno al abdomen. Uno de los ejercicios que más me cuestan es “Rodillas al pecho”, ya en el nivel 4 del modo Aventura llamado Dracoestadio. El dragón me pone a prueba con estos crunch que me dejan unos abdominales inferiores cincelados.

De nuevo de pie, en “Pose de la Victoria” hay que subir los brazos y apretar el aro ejerciendo presión sobre la cabeza. Bien de hombros después de esto, gracias Nintendo.

Trasteando por Ring Fit Adventure descubro que hay un montón de mini-juegos, y que cada uno de ellos trabaja una zona concreta del cuerpo. Yo me quedo con el del taller de alfarería. Me digo a mí misma que eso me dará una tregua…craso error: toca moldear un jarrón presionando el Ring-con. Hay que esforzarse. Eso sí, dentro de mis posibilidades: al ser mi primera vez, he puesto el nivel más suave: Se trata de imitar el jarrón de la izquierda jugando con la presión de los brazos. ¡Soy un desastre! Pero me pico y hago unas cuantas pruebas. A la vez, hay que hacer sentadillas.