Piel grasa: características, causas y tratamiento para deshacerte de los brillos y poros dilatados

Quien tiene la piel grasa sabe que sus principales enemigos a batir son la producción de sebo y la aparición de granitos, que en este caso son mucho más frecuentes que en otros tipos de pieles. Sin embargo, no hay que confundir un exceso de grasa con un exceso de hidratación, pues una piel de este tipo también puede estar deshidratada. Hay que mantener los niveles de agua escogiendo los productos adecuados y manteniendo hábitos saludables.

Características de una piel grasa: la lucha continua contra los granitos

Esta dermis e un tipo que se identifica a simple vista porque suele generar brillos, más allá de las zonas más típicas en otras pieles, como la zona T. La farmacéutica Carmen Bauzá lo explica así: “La piel grasa se caracteriza por un aumento de la producción de grasa por las glándulas sebáceas. Esto se da, sobre todo, en las zonas donde hay mayor presencia de estas glándulas, como la cara y el tórax. Con frecuencia, se produce inflamación, infecciones y un taponamiento de los folículos, lo cual provoca la aparición de granos o comedones y puntos negros”.

Causas de la piel grasa: ¿se puede controlar?

Como en todos los tipos de piel la herencia familiar juega un papel fundamental en este sentido: “Los factores genéticos o herencia influyen ya que es común que personas con piel grasa tengan familiares con características cutáneas similares”, apunta la farmacéutica. ¿No sabes qué tipo de piel tienes? Puedes hacer nuestro test para averiguarlo. 

Y enfocándonos en factores más científicos, Bauzá explica lo siguiente: “El aumento de la secreción sebácea es consecuencia de la acción de las hormonas en las glándulas sebáceas. Por ello, es innegable que los cambios hormonales juegan un papel clave”. Por tanto hay algunos periodos dela vida, como la adolescencia -¿quién no ha lidiado con algún brote de granitos en esta etapa?- la tendencia a la piel grasa sea mayor.

Por otro lado, sí que hay algunos factores que podemos controlar como los alimentos que ingerimos: “El impacto de la dieta en la producción excesiva de grasa también se valora, especialmente los alimentos ricos en azúcar”, aclara Carmen Bauzá. Por otro lado, la experta apunta otro pilar sobre el que poner el foco: “También influye la salud de la microbiota cutánea. Es decir, los microorganismos que viven en este tejido. Su alteración se relaciona con alteraciones cutáneas como el acné”.

Errores que debemos evitar en la piel grasa

Tan importante son las prácticas que hacemos correctamente como evitar aquello que favorece el empeoramiento de la piel grasa. “El principal error es intentar “secar” con opciones agresivas, como un exceso de limpieza, el abuso de las mascarillas astringentes o exfoliantes”, nos cuenta la farmacéutica. Y es que este tipo de producto puede irritar la piel y además conseguiremos un efecto rebote con más producción de grasa. Por supuesto, evitar hábitos como el tabaquismo y la comida basura también contribuirá a una mejora de la piel.

Los ingredientes que debemos buscar en los productos para piel grasa

A la hora de escoger los productos con los que vamos a mimar nuestro rostro es importante saber cuáles serán esos elementos que nos permitirán mejorar y calmar esta dermis. La farmacéutica, concretamente nos recomienda dos. “El ácido salicílico es muy beneficioso en este tipo de piel para reducir la producción de grasa y producir un efecto queratolítico que ayude a renovar capas superficiales”. Por otro lado añade otro ingrediente que no paramos de escuchar, debido a sus propieades: “La niacinamida ayuda a regular y mejorar la cantidad de sebo, además de tener un impacto positivo en la apariencia de los poros”.

Los mejores tratamientos para piel grasa