6 tipos de mechas de tendencia para verano 2023 que sientan bien a todas

El melting hair es una técnica consiste en que el color se funda de manera progresiva y difuminada creando un brillo totalmente natural. Es la más sutil de todas. Puede realizarse en todo tipo de tonos, desde rubios, cobres, rojizos, castaños, etc.

Las mechas babylights son las más demandadas por excelencia en los salones. El motivo es que es una técnica muy favorecedora porque iluminamos la melena globalmente con hilos dos tonos más claros que el tono de la clienta y de este modo aportamos mucha luz. Podemos combinar esta técnica con diferentes matices, en los más rubios y en melenas más amarronadas.

El efecto glossy busca el brillo duradero en el pelo, pero de forma natural. En realidad es una variante de las mechas babylights, pero con menos contrastes. La idea es simular el brillo de la melena, normalmente lo aconsejamos para los tonos más caramelo, castañas claras, medias... El pelo de la top model Kaia Gerber es un ejemplo perfecto. 

Consiste en iluminar las bases más castañas en tonos caramelo para aportarle ese efecto más fresco y cálido a la melena. 

Con esta técnica jugamos con los volúmenes e iluminaciones del rostro. Se ha convertido en una de las preferidas por muchas famosas, como la top Gisele Bundchen, porque es muy favorecedora. Al iluminar puntos estratégicos de la melena (como los mechones cercanos al rostro), relajamos las facciones y damos un aire más rejuvenecedor.

La técnica de moda de las mechas cherry chestnut surge como una inspiración en el color de la cereza. Es una apuesta para las morenas más atrevidas que quieren darle algo de color a su castaño clásico. Es un color muy sexy.