Descubre la colección de perfumes premiada para los que viven el arte como parte de la belleza

Hay colaboraciones que marcan tendencia, y otras que marcan época. La que une a INFINIMENT COTY PARIS (con más de un siglo de experiencia en perfumería) y la artista Deborah Segun pertenece, sin duda, a la segunda categoría. Porque no se trata solo de poner imagen a una fragancia: se trata de crear una experiencia completa donde el arte, el color y el perfume se funden para contar una historia común.

En esta nueva activación, la artista nigeriana, conocida por su estilo vibrante, abstracto y con guiños al cubismo, interpreta dos de las fragancias de la colección: Soy el Amanecer y Soy el Día. El resultado es un jardín imaginario, exuberante, libre, donde los aromas despiertan recuerdos y los trazos dibujan emociones.

La marca, además, ha sido reconocida con el Premio InStyle Belleza con Influencia 2025 al Perfume Más Audaz. Un galardón que celebra su capacidad para reinterpretar la perfumería con una mirada contemporánea, libre y valiente.

Un jardín infinito para una primavera eterna

Deborah Segun no pinta flores: pinta lo que evocan. Su visión de la primavera no tiene que ver con lo literal, sino con lo sensorial. En palabras de la propia artista, las fragancias de Coty la llevaron a lugares íntimos y personales: recuerdos de la infancia, paseos de estudiante por Florencia, tardes tumbada sobre la hierba mirando las nubes, emociones que no necesitan explicación.

Con esa inspiración ha dado forma a un nuevo patrón artístico abstracto, traducido en una instalación inmersiva en tienda que transforma la experiencia de compra en algo mucho más cercano al arte contemporáneo que al retail tradicional.

 

 

 

 

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Fragancias que cuentan historias

Cada perfume de la colección de INFINIMENT COTY PARIS funciona como un capítulo en esta narrativa sensorial. Matin de Jade, por ejemplo, huele a fruta recién exprimida y a primeros días de verano; Atomes Crochus captura ese instante ligero en el que todo está en flor; Les Mots Doux es un canto melancólico a la ternura que se desvanece. Y luego está J’ai Trois Amours, que Deborah describe como “una armadura olfativa que se abre a la risa”: dulce, ácida, luminosa.

Las fragancias se convierten así en materia de creación artística. Y viceversa. Porque el arte de Segun también tiene algo de perfume: no se impone, sino que se insinúa; no explica, sugiere.

Una edición limitada para quienes coleccionan momentos

Como broche final a esta colaboración, Deborah Segun ha intervenido personalmente 55 frascos de perfume en una serie exclusiva, firmada y numerada, que estará disponible en InfinimentCoty.com para las primeras compras de recarga. Cada uno es una pieza única, pintada a mano, y da acceso a un círculo de coleccionistas con beneficios especiales. Un lujo silencioso, íntimo, para quienes valoran lo irrepetible.

El arte de perfumar con audacia

La colección Infiniment Coty Paris, creada por Sue Nabi y Nicolas Vu, se compone de 14 fragancias con altas concentraciones de ingredientes nobles, concebidas como auténticos retratos olfativos.

Ahora, esa audacia se mezcla con arte. Y el resultado es una colaboración que no solo huele a jardín, también huele a futuro.