640px Nina2
InStyle | Danniel Rojas

El 27 de abril llega a Atresplayer la serie musical Mariliendre, creada por Javier Ferreiro y producida por los Javis. En medio de un reparto de caras jóvenes, con la actriz Blanca Martínez a la cabeza, destaca Nina Agustí (Barcelona, 1966), a quien la generación boomer descubrió en el mítico Un, dos tres y que, gracias a Operación Triunfo (donde se desempeñó como directora de la academia) y ahora Mariliendre, se ha ganado las reverencias de la generación Z. Sin embargo, ella, de vuelta de muchas cosas y con la fama bien digerida tras años de exposición, huye del boato de la popularidad. “Estoy en otra liga”, afirma. “Ahora lo que quiero es vivir.”

Primero de todo, ¿cómo llega una chica como tú a una serie como esta?

Me contactan por correo. No tengo representante porque no he encontrado quien defienda mis intereses artísticos mejor que yo. Lo tuve en los primeros años de mi carrera y nunca más. Afortunadamente, hoy, con redes etc, todo es más fácil, así que no les costó dar conmigo. Me dijeron una frase que, en aquel momento, pensé que se lo decían a todas; algo así como que mi perfil encajaba muchísimo, que tenía grandes posibilidades. Para mí ha sido un regalo, porque no todos los días te llega un guion tan trabajado como el de Javier Ferreiro. En mi opinión, el hecho de que sea una serie musical la singulariza. Estoy segura de que el espectador cantará todas las canciones, porque son himnos que han pasado de generación a generación. En este sentido, Pablo Lluch y Vic Mirallas, quienes se encargaron de la música, han hecho un trabajo extraordinario. Quiero agradecerle especialmente a Pablo y al equipo técnico el hecho de que me propusieran cantar en directo en las escenas de más carga emocional. 

Te ha tocado ser madre de ficción.

Mi personaje se llama Inés y es una madre dura, pero por las circunstancias que ha vivido. La suya ha sido una vida de renuncias y lo ha hecho absolutamente todo por guardar las apariencias y mantener unida a su familia. Sus hijas, Paula y María, son su tormento pero, por encima de todo, son su vida.

nina
InStyle | Danniel Rojas

Vestido de raso y sandalias; (ferragamo.com). Pantalón, de Nina.
 

¿Tú eres un poquito mariliendre?

Pensándolo bien, me he dado cuenta de que tengo muchísimos amigos homosexuales desde siempre, pero no sé si soy lo que significa mariliendre. Quiero decir que no he tenido jamás la sensación de que yo fuera una amiga especial para mis amigos gays. Sin embargo, algo de eso hay en Inés, porque lo vive en el seno de su familia.

Ahora que has trabajado con los Javis, ¿entiendes todo el revuelo que se monta a su alrededor cada vez que anuncian un proyecto?

Comprendo perfectamente y de primera mano el porqué de su carrera tan exitosa a pesar de su juventud. Están al quite de todo, no dejan pasar ningún detalle, cuidan mucho lo que hacen, a los equipos, a las personas... Y eso se traduce en resultado. Yo no los conocía; a Javi Calvo un poco más, pero apenas nada. Desde fuera, y aunque no los hayas visto trabajar, ya te das cuenta de que son personas apasionadas por lo que hacen. Una vez dentro, he podido constatar que eso es así. 

Ya que has vuelto al audiovisual, ¿te apetece reengancharte?

Tengo ganas, pero también tengo casi 60 años. Mi teoría es que el haber hecho un programa tan conocido como OT te condiciona, aunque a los Javis no les haya importado para llamarme (es cierto que cuando luego vi el papel entendí por qué lo habían hecho y se lo agradezco muchísimo). Me lo propusieron sin complejo ni prejuicio y tenían muy claro que debía ser yo. Los productores y directores seguramente conservan la imagen de Nina de OT y yo soy mucho más que eso. He seguido haciendo musicales (lo mejor que me ha pasado en la vida es haber protagonizado Mamma Mia! durante nueve temporadas); de hecho, hace dos años estuve en Madrid con Los puentes de Madison. Pero no soy de esas actrices y cantantes que seguirá en activo con 70 años; no tengo esa sensación. Eso no quiere decir que si se presenta otro proyecto como Mariliendre no vaya a decir que sí, porque es un bombón. Pero llevo 42 años en primera línea y está bien empezar a pensar en cómo quiero vivir mis últimos años. 

nina
InStyle | Danniel Rojas

Traje, camisa, corbata y zapatos de estilo masculino; (armani.com).

Vayamos al principio de los tiempos, a aquel Un, dos tres...

Pasó como por accidente porque ni me presenté. Fui a actuar con la orquesta en la que yo cantaba y de ahí me contrató Chicho Ibáñez Serrador (director del programa). 
Tus años de orquesta deben de haber dado para muchas anécdotas. Es la mejor escuela. Ahí es donde aprendí todo, lo fundamental del oficio, su dureza y su naturaleza inestable. Me curtió mucho. Cuando empecé a cantar no había mujeres en orquestas, yo fui la primera. Se llamaba Costa Brava. Mis padres, que siempre me apoyaron, me acompañaban a todos los bolos hasta que tuve edad para sacarme el carné de conducir. Estamos hablando de muchos años atrás y del contexto de un pueblo, muy distinto a una ciudad. En un pueblo todo se dimensiona.

¿Es cierto que te has hecho un máster en Investigación Clínica?

Sí. Cuando terminó la tercera edición de OT decidí que me iba a retirar un poco del escenario por razones obvias y para dejar pasar la ventolera generada. Entonces me puse a estudiar, que era algo que no había podido hacer de pequeña porque soy de aquella generación que dejaba de estudiar para ponerse a trabajar. En mi entorno era habitual. Luego, con 36 o 37 años decidí hacer el acceso a la universidad y hasta 2022, que terminé el máster. Saqué la carrera de logopeda, lo que me llevó muchos años porque la combiné con mi actividad profesional, que tenía una doble vertiente: por un lado la parte artística y, por otro, mi actividad docente. Dirijo Nina Academia desde hace 20 años y preparo a gente maravillosa. 

nina
InStyle | Danniel Rojas

Pantalón y chaqueta a rayas, con solapa a modo de chal y hombreras marcadas (palomospain.com).

Creo que no solo ‘educas’ a cantantes, sino que también haces rehabilitación.

Estoy especializada en voz. He acompañado a personas con esclerosis lateral amiotrófica, he hecho rehabilitación de pacientes con traumatismos cranoencefálicos que intentan recuperar el habla... También educo en comunicación, por supuesto, y actuamos sobre problemas de voz en cantantes o docentes, que sufren mucha patología vocal. Ahora ya no me dedico tanto (tengo un equipo de ocho personas), pero estoy muy encima, porque mi academia es mi niña, mi tesoro. 

¿Notas como si hoy casi todo el mundo se siente cantante?

Es posible, pero te aseguro que el 90% de los alumnos de mi academia son gente muy buena. No sé de dónde sale tanto talento. Es una generación que ha escuchado toda la música habida y por haber gracias a Internet y eso curte, porque es una etapa vital en la que te estás formando y te aporta una riqueza cultural, musical y vocal increíble. Y luego son personas que vienen superpreparadas, con estudios de solfeo, de piano... Se ve la magia, pero también te digo que eso no es todo, porque igual te encuentras a gente a quienes la actitud no acompaña o no son perseverantes. Y con este oficio hay que ser muy rigurosos, si no, no vas a ningún lado. 

nina
InStyle | Danniel Rojas

Bimba y Palomo traje con chaqueta cruzada y mangas oversized; (bimbaylola.com). Zapatos masculinos; (armani.com).
 

En OT te creaste fama de dura. ¿Te llegó a afectar?

No, porque era otra época en la que no había redes ni móviles. No me afectó gracias a eso; si hubiera pasado ahora sería tremendo. A pesar de ello, en la segunda edición hubo momentos difíciles porque luchabas con 17 energúmenos que con 18, 19 o 20 años venían con toda la ilusión, pero luego no querían cantar según qué y aun así tú te tenías que preparar una gala de dos horas. Era tu responsabilidad. A mí me hacían ese encargo y yo debía sacar la gala adelante. En aquella edición los concursantes ya sabían dónde estaban y había muchas resistencias. Bajé un poco la guardia porque me llegó ese comentario de lo dura que era con ellos, pero también me di cuenta de que la productora sacaba muchas imágenes mías poniendo los puntos sobre las íes. Ahí empecé a aparecer menos y contenerme más porque, obviamente, te marca. 

“Ser famoso de la noche a la mañana es una adversidad”, has dicho.

Sí, es algo que te pasa de un día para otro, como cualquier adversidad, y tienes que gestionarlo emocionalmente porque si no, te la pegas. Se desencadenan unos problemas psicológicos que hacen que te apartes de ti, que debas aprender a ser humilde. Eso de que todo el tiempo las personas te pongan por las nubes o lo contrario.... Si estás arriba, tan malo no serás. He pasado por eso varias veces, tengo un máster (risas). Y noté una sensación muy curiosa, como de haber resucitado sin necesidad de haberme muerto. La gente preguntaba “donde has estado”, “qué has hecho” y yo seguía mi carrera en Cataluña aunque hubiera desaparecido del resto de España. La fama tiene estas cosas: de repente estás arriba y de repente abajo. Nadie se acuerda de ti, el teléfono no suena y has de aprender a apreciar tu propio reconocimiento. No el de los demás, el tuyo.

nina
InStyle | Danniel Rojas

Vestido de rayas; (es.sportmax.com). Zapatos; (armani.com).
 

¿Es cierto que no tienes televisor en casa?

Sí. Mi madre, que vive conmigo, tiene uno en su habitación y yo, un ordenador. Con él puedes estar conectado a todo. Fíjate que, de Netflix, habré visto dos series, la última el otro día. De los Javis sí he visto La Mesías, pero no soy muy de tele yo.

¿Y de qué eres entonces?

De ir a nadar al mar cada día. En lo que va de año habré faltado tres días por temporal y da igual, porque voy a la piscina. Nado, camino, monto en bici... El deporte es muy importante. También me gusta escribir y el 27 de marzo sale mi tercer libro, titulado La menopausia, los mejores años de tu vida. Yo tuve una menopausia precoz, a los 44, por una intervención quirúrgica, no pasé la perimenopausia y me perdí todo ese primer acto en el que el cuerpo te avisa de los cambios. Al cabo de unos años, en un podcast que hago de divulgación sobre la voz humana, hablé de ello. Al parecer, alguien me debe escuchar, porque me propusieron hacer este libro desde mi experiencia. Cuento lo que he vivido como persona que hace deporte y cuida su alimentación para abordar ocho funciones semanales de teatro. A partir de ahí, toco aspectos de respiración, cuerpo y mente, pero también hormonas, climaterio... 

La menopausia ha pasado de ser tabú a convertirse en tema de debate.

Escribiendo me he dado cuenta de que no hay nada sobre ella hasta hace tres décadas, que es cuando se empezó a investigar. La investigación la hacen mayoritariamente hombres y es inevitable pensar que si sufrieran el insomnio y los sofocos asociados quizás se habrían esforzado más. Empiezo el libro con una conversación con mi madre, que tiene 87 años, y mi tía, de 90, y a ambas les hago una pregunta muy sencilla: “¿Cómo viviste la menopausia?”. Y yo ya sabía lo que me iban a contestar: “Normal”. Efectivamente. A partir de ahí empiezo a analizar por qué nosotras, teniendo información, podcasts, libros, terapeutas, dinero, tiempo, gimnasios, la vivimos (o al menos yo tengo esa sensación), mucho peor. Es para reflexionar…

  • Realización: Francesca Rinciari.
  • Maquillaje: Gato (Kasteel Artist).
  • Peluquería: Fernando Torrent; (Another Artists).
  • Asistente de realización: Piluca Valverde.
  • Asistente de fotografía: Javi Blanco.