Buscaba unas sandalias para verano y estas de Skechers me han sorprendido: con suela ergonómica, cómodas y bonitas

Ahora que se empiezan a notar las altas temperaturas, cambiamos nuestras botas de piel por las sandalias, fresquitas y muy cómodas. Aunque hay miles de opciones entre las que escoger, es cierto que no todos los modelos cumplen con los requisitos que, como experta en moda, te recomiendo que consideres antes de comprar.

Lo primero que tenemos que tener en cuenta es el tipo de sujeción. Una sandalia puede ser ideal, pero si no sostiene bien el pie, puede resultar de lo más incómoda. Por ello, las tiras anchas, los cierres ajustables o incluso las versiones con hebillas son algunos de los detalles en los que tenemos que fijarnos. Estos permiten que el calzado se adapte, evitando rozaduras, deslizamientos o torceduras.

Otro aspecto esencial es la plantilla. Hay algunas marcas que incluyen una base acolchada, ergonómica o con soporte para el arco plantar, marcando por completo la diferencia en el resultado. Su eficacia ha hecho que no solo las podamos encontrar en esos modelos más deportivos, sino que también se integran en sandalias más sofisticadas, cumpliendo con el binomio de estilo y funcionalidad.

La altura del tacón también juega un papel clave. Aunque ir en planos es una de las tendencias más notables en la actualidad, es cierto que hay algunas que no podemos renunciar a un par de centímetros. En estos casos las cuñas o las plataformas siguen siendo las predilectas, ideales tanto para el día a día como en ocasiones más especiales. Como novedad, este año veremos otras propuestas con tacón sensato, cuadrado o tipo “kitten heel”, los reyes indiscutibles del street style.

Por último, no hay que olvidar el uso que le vamos a dar. Si buscas un par con el que recorrerte la ciudad o ir a la oficina, te conviene comprar uno que resista el trote diario. En cambio, para eventos, podemos arriesgar un poco más tanto en los colores como en el formato. Eso sí, siempre manteniendo el temido dolor de pies a raya.

Hemos encontrado en Skechers las sandalias más cómodas y bonitas de la temporada

Después de haber comentado todos los puntos clave antes de lanzarte a comprar tu próximo par de sandalias, es el momento de comenzar la búsqueda. Esta importancia del confort a la hora de caminar, ha hecho que muchas firmas conocidas se especialicen en ello, pero sin perder de vista las tendencias más potentes del momento.

Skechers es una de las que cumple con ello a rajatabla, fichando este par que ya se ha venido con nosotras a casa. Se trata de un modelo aparentemente sencillo, pero que lo tiene todo. En color negro, que asegura su versatilidad, da el toque de gracia con los brillos en la parte del empeine, lo que hace que queden de maravilla en looks de noche.

Su minimalismo evoca décadas pasadas, como los años 90 y los 2000, destacando la tira trasera que es lo que asegura la sujeción en este caso. La suela cuenta con una plantilla con amortiguación Yoga Foam®, por lo que no tendrás que preocuparte de que te salgan rozaduras.

Cómo combinar de forma elegante las sandalias de Skechers esta temporada

Aunque tiene cabida tanto para el día como por la noche, te vamos a proponer un look que te vale para cualquier cita que tengas en la agenda. Escogemos el clásico vestido lencero negro, para un total look sofisticado, dando el toque de gracia distintivo a través del bolso, que hemos seleccionado en un tono potente, pero que no desentona más de la cuenta.

Vestido lencero de Massimo Dutti

Es uno de los básicos más atemporales que podemos tener en el vestidor, que siempre te saca de un apuro cuando no sabes qué ponerte. En este caso queda de maravilla con las sandalias, dando un toque extra de sensualidad y feminidad.

Bolso trenzado de Parfois

Para el bolso, y con el fin de dar un toque distintivo al estilismos (sin que quede demasiado recargado), hemos escogido este bolso de piel en clave trenzada y color verde oliva, dos de las tendencias más potentes en la industria actual.

Pendientes de Agatha Paris

Si te vas a decantar por rematar con alguna joya, estas sin duda tienen que ser en clave dorada. Lejos de los clásicos aros, que por mucho que nos gusten puede acabar siendo repetitivos, fichamos estos en forma de concha súper veraniegos. 

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