Ya lo decía la canción, Sevilla tiene un color especial. No solo por el arte de su gente, sus calles con olor a azahar o su pasión en todo lo que hacen, también por la tradición de sus costumbres y el culto a la costura y artesanía local, algo que conoce muy bien la casa Dior desde que en 1950 se cruzase España en el camino del Sr. Dior. Lazos que sus sucesores se han encargado de cuidar y fortalecer y a los que este verano Maria Grazia Chiuri hará homenaje.