Violeta Mangriñán nos abre las puertas de su nueva casa en Madrid

Como ya confesaba a sus seguidores antes del verano, la influencer regresa a Madrid en busca de una mejor conciliación entre su vida profesional y privada. Y es que la valenciana compartía en sus redes sociales lo complicado para ella de tener que separarse de su hija Gala cuando tenía que viajar a la capital por cuestiones de trabajo. Es por eso que, a pocos meses de dar a luz a su segunda hija, Violeta termina la mudanza y deja todo listo para dar la bienvenida a la que será la nueva miembro de la familia.

350m² de puro estilo y tendencia

El nuevo pisito al que se han mudado Violeta y su familia es un apartamento de 350m²con terraza y, como ocurrió cuando compró su casa de Valencia, ha contado una vez más con la ayuda y el asesoramiento de Westwing para decorarla y reflejar en ella su estilo personal. "La verdad es que Westwing nos encajó a la perfección en ambos diseños, porque tienen mucha variedad de estilos y producto, por lo que es muy complicado que no se adapte a tus necesidades a la hora de decorar. Además, siempre encontramos la mezcla perfecta para que el diseño sea cool sin perder calidad" nos cuenta la influencer.

A la vista está que Violeta y la marca de decoración hacen un gran equipo, y es que hemos podido comprobar cómo han jugado con la mezcla de colores, formas y texturas para conseguir un resultado moderno a la par que estético y armonioso. "Considero que esta vez he arriesgado y jugado un poquito más con el diseño y colores, pero siempre me gusta mantener una línea minimalista y aesthetic” confiesa la valenciana.

Cuando preguntamos a Violeta sobre qué ha aprendido en este segundo cambio de hogar, reconoce que la luz natural es fundamental para su trabajo y que, gracias a su interiorista de Crisitna Nogué Studio, ha podido comprobar cómo los espejos son el mejor aliado para generar amplitud y aumentar la luminosidad.

Violeta confiesa también que sus estancias favoritas de la casa son el salón, el vestidor y, sobre todo, el cuarto de su hija Gala: "Cuando decoras siendo madre creo que piensas mucho en la comodidad y en que las piezas sean prácticas a la par que bonitas. Además, cuando hicimos la distribución de las habitaciones, lo primero que pensamos era en tener a las niñas cerca de nuestro dormitorio para que las noches sean más tranquilas para todos".

Pero aunque haya cambios de estilos y decoración en el nuevo apartamento, la valenciana se mantiene firme en un elemento que ya forma parte de su esencia: el color verde. "Mi audiencia me llama “The Queen of Matcha” por mi obsesión con el té, pero también con el color verde. Además, es un color lleno de connotaciones positivas: esperanza, crecimiento, tranquilidad...". Y es que, una vez más, Violeta ha querido agregar detalles en este color tan simbólico a su dormitorio, con una cama LENON de Westiwing, que combina a la perfección con el beige de los cojines y la lampara de techo.