8 planazos para celebrar San Valentín si estás soltera

Aunque no lo creas, no tener chico el Día de los Enamorados no es un drama, sino el momento perfecto para redescubrirte a ti misma. Pasa tiempo con las personas que quieres y haz los planes que más te apetezcan a ti... ¡porque no tienes que consultarlos con nadie! A continuación te hacemos algunas propuestas para el 14 de febrero.

Es cieto, todos los días es el día perfecto para disfrutar de una tarde exclusiva para ti, regalándote los mejores mimos o tratamientos de belleza. Hacer una manicura, pedicura (o ambas), una sesión de meditación o salir de shopping son planes que se disfrutan mejor sola, haciendo tuyo el tiempo.

Puede que no parezca una gran celebración, pero no hacer nada puede ser la mayor de todas. Ponte algo cómodo (o incluso lo más feo que tengas), hazte un moño y disfruta de las mejores cosas que la vida de soltera tiene para ofrecer, que son muchas: escucha tu música favorita, navega por las tiendas de online, ve a tu cafetería favorita (permítete el lujo de ligar con el camarero), pide comida a domicilio y disfruta de tu independencia haciendo lo que te de la gana... porque no tienes que darle explicaciones a nadie.

No hay mejor manera para aprender sobre el amor que hablar con una mujer sabia y mayor, que ha pasado por más de lo que crees y puede estar dispuesta a compartirlo. Charla con tu abuela, con tu madre o con tu tía, con alguien cercano, y escucha sus historias sobre el amor, la angustia, la amistad y la independencia. O comparte una botella de vino y habla sobre la vida. Es el momento ideal.

Hablando de sabiduría, aquí va un tip de la serie Sexo en Nueva York: "Quizás nuestras amigas sean nuestras almas gemelas y los chicos solo personas con las que divertirse". Porque ¿qué mejor manera de pasar San Valentín que con tus amigas solteras? Ya sea para hacer un viaje, irse una noche de cócteles o montar una superfiesta de pijamas. Dedica tiempo a las personas que quieres, no siempre tiene que ser tu pareja.

Ir a un bar a tu bola es una de las cosas más poderosas que puedes hacer. Bebe, lee, observa a la gente e, incluso, permítete el lujo de coquetear con alguien el día de San Valentín... ¡quizás haya más solteros tomando cañas! Será una forma divertida de pasar el día.

¿Y si haces una acción desinteresada? Una forma perfecta puede ser cuidar del hijo o los hijos de tu amiga para que ella pueda tener una cena de San Valentín increíble. Te sentirás muy bien regalando tu tiempo de esta forma.

O a ti misma, ¿por qué no? ¡Y no es broma...! Está bien, no tienes por qué dibujar corazones y dirigirlo a una "Querida-tú-misma". Pero tomarse un tiempo para reflexionar sobre todas las cosas que amas en la vida y de ti misma puede ser una experiencia muy positiva. También puedes organizar un intercambio de tarjetas con tus amigas, solteras o no, en las que cada una escriba a una amiga una carta sobre lo que la hace tan fabulosa. ¡Os sorprenderéis!