Vivimos en un momento en el que los estilistas de renombre se han convertido en las nuevas estrellas. Lejos de limitarse a orquestar los looks de sus clientes, posan junto a ellos en las revistas más prestigiosas, protagonizan reportajes y entrevistas y forman parte de listados tan aclamados como los realizados por The Hollywood Reporter.

Por ello, cuando una figura es aclamada no solo por los medios, sino por los galardones, se convierte en uno de los nombres del momento de la moda, y si encima está vinculado a la que es la celebridad cuyos looks tan resultado ser los más aplaudidos, estamos hablando de un peso pesado de la industria.

Pues por todas estas razones es tan difícil de entender que quien ha sido elevado al olimpo del estilismo decida en el punto álgido de su carrera retirarse, y eso es lo que ha hecho Law Roach, el estilista de Zendaya. Asegura que lo que le diferencia del resto es que se esfuerza por comprender realmente quién es su clienta no para cambiarla, sino para elevarla y lograr así su mejor versión.

Prueba de su importancia es que le hemos visto en el front row de los desfiles más codiciados junto a los grandes de la moda y al lado de las celebridades invitadas, borrando de esta forma la delgada barrera entre el famoso y el estilista. Por cierto: prefiere hablar de sí mismo como un “arquitecto de imagen”, porque genera un universo y una historia alrededor de cada look.

Él ha sido el primer estilista en recibir el premio al estilismo que en 2022 inauguraron los prestigiosos CFDA Awards. “Como en los cuentos de hadas, sus orígenes fueron humildes. Iba con su abuela a tiendas de segunda mano en las que comenzó a desarrollar esa magia que desembocó en esta coronación”, dijo Kerrry Washington en el discurso.

“En 2010 el destino llamó a su puerta cuando un amiga le preguntó si podría vestir a una estrella Disney muy joven para acudir a la premier de una película de Justin Bieber. Hablamos de los comienzos de la dominación de Zendaya. Fue una lucha encontrar a diseñadores que quisieran vestir a una niña Disney, y como ejemplo de su genialidad se encargó de dar forma a un icono. De hecho, en 2019 se convirtió en su hada madrina en la gala MET”, señaló la actriz al hablar del icónico momento en el que Zendaya recorrió la alfombra roja con un vestido de Tommy Hilfiger inspìrado en Cenicienta.

Law Roach
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Law Roach

Sin embargo, cuando desde CFDA le preguntaron a él cuál fue el que considera el momento que lo cambió todo, habla de otro. “Creo que fue en 2017 con Celine Dion en París. La sudadera de Titanic de Vetements fue probablemente uno de los primeros momentos virales de la moda en las redes sociales. Creo que fue entonces cuando mi carrera cambió. Estaba trabajando con Ariana Grande y Zendaya, así que tenía algunos clientes bastante importantes, pero el público global me amó cuando fui a París la próxima temporada. Celine Dion es una reina en todos los países. Creo que fue entonces cuando la gente comenzó a verme también como un disruptor. Estaba haciendo cosas que no tenían sentido. Si hubieras cerrado los ojos y dicho: "Celine Dion usa una sudadera con capucha de Vetements", hubieras dicho: "Suenas estúpido", dijo.

Hunter Shafer
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Hunter Shafer en los Oscar

La forma en la que ha transformado la alfombra roja al recurrir a los diseños de archivo de las grandes marcas ya ha cambiado las normas de la red carpet, y por eso, tras haber vestido a Hunter Schafer en la afterparty de los Oscar con un impresionante look de la colección otoño/invierno 2023 de Ann Demeulemeester que ha sido aplaudido con entusiasmo, encontrarnos con un post en el que anuncia su retirada nos ha dejado boquiabiertos.

“Mi copa está vacía... Gracias a todos los que me han apoyado a mí y a mi carrera a lo largo de los años. Estoy muy agradecido a todos los que me han confiado su imagen. Si este negocio se tratara solo de la ropa, lo haría el resto de mi vida, pero por desgracia no es así. La política, las mentiras y las falsas narrativas han acabado conmigo. Vosotros ganáis... yo me largo".

Se sospecha que el que Zendaya haya firmado un contrato con Louis Vuitton podría ser uno de los motivos principales de este repentino adiós, pues este acuerdo podría limitar sus licencias creativas. De hecho, en el último desfile de la firma, llegaron juntos, pero él se encontró con que estaba sentado detrás de la actriz, que se encargó de mostrarle su asiento ante su estupefacción, pues claramente pensaba sentarse a su lado.

Es posible que el estilista haya considerado que ese era un golpe a su ego, pues no ha dudado en más de una ocasión de hablar de este tema. “Siempre quiero ponerme a prueba. Creo que ser complaciente me ayuda a mantener mi ego bajo control. No es que tenga un gran ego, pero cuando llegas a cierto nivel, tienes gente a tu alrededor que te dice todo el rato que eres el mejo. Una cosa que me mantiene humilde es que sé que estoy en una industria de servicios y no soy diferente del entrenador, el chef, la niñera o el paseador de perros. Me pagan por prestar un servicio. Y esa es sólo la verdad”, dijo a los CFDA, y estas palabras hoy cobran más peso que nunca. El estilista acaba de desfilar para Boss junto a nombres como Pamela Anderson y ha reconocido estar feliz de que la gente no le vea simplemente como "alguien que viste a las famosas".

Law Roach
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Law Roach

En unas declaraciones que han salido a la luz recientemente, explicó la importancia de imponer respeto. “No puedes hablarme de cualquier manera ni puedes tratarme de cualquier modo. Estoy imponiendo cierto tipo de respeto y si no me lo estás dando, vamos a tener un problema. No le tengo miedo a esta industria, porque soy negro y soy de barrio, al que siempre puedo volver. Siempre podré ganar dinero y siempre podré tener éxito. Me alejaré de toda esa mierda porque soy un luchador nato". En el vídeo, el estilista dejaba caer que la industria no le estaba tratando como se merece, y quizás esa segunda fila en Vuitton haya sido la gota que ha colmado el vaso…

Zendaya
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Zendaya vestida de Balmain vintage

Desde el diseñador Christian Siriano hasta Naomi Campbell, que le ha dicho que no le va a permitir que se retire, han sido multitud las celebridades las que le han rogado que no se vaya. ¿Sabéis quién no ha dicho nada? Zendaya…

Mientras que tantos se limitan a llamar a las marcas para conseguir los looks que acaban de ser presentados sobre la pasarela o para que sus clientas luzcan los diseños que protagonizan todas las portadas y editoriales de las revistas de moda, él ha sabido siempre bucear en los archivos de las firmas (de hecho, tiene su propia colección vintage) para rescatar inolvidables modelos como el vestido de Balmain de 1956 que Zendaya lució en los NAACP Image Awards. Si realmente se retira de la profesión (acaba de confesar que le gustaría dar clases y que todavía no tiene claro cuáles serán sus siguientes pasos), dejará un inmenso vacío, pero también una lección de cómo hacer las cosas de manera diferente, con cabeza y sobre todo, con pasión.