Que el thriller es uno de nuestros géneros favoritos es algo que no sorprende a nadie. Sin embargo, cuando nos apetece desconectar de él (cosa que yo agradezco, la verdad), hay una temática que siempre me engancha: las familias disfuncionales. No me mires así, las tramas con este eje como principal protagonista tiene algo que las hace irresistibles como objeto de estudio y son bueníismas combinando humor negro y drama a partes iguales.
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Son geniales para mostrar el lado oscuro de las relaciones humanas: las rivalidades, los secretos guardados con celos y, por supuesto, las motivaciones que van más allá de la simple convivencia. Las familias que parecen tenerlo todo, desde dinero hasta poder, casi siempre son las más complicadas de todas. Y cuando se mezclan con una fuerte dosis de ambición y creencias que se tambalean al borde de la hipocresía, las cosas pueden volverse realmente interesantes.
¿Nos atrapan los escándalos? Sí y no, porque lo hacen, claro, pero lo que nos anclan al siguiente capítulo son más bien las contradicciones. Cómo esas familias, aparentemente perfectas en su fachada, esconden una maraña de intereses personales, rivalidades y emociones complejas que se muestran solo en los momentos más inesperados.
Esa es la magia de las historias que nos hacen cuestionar todo lo que pensamos que sabíamos sobre la moralidad y el deseo, las historias que exploran cómo los seres humanos, en su forma más cruda, pueden ser tanto egoístas como profundamente vulnerables.
Y si hablamos de una familia con dinero, poder y secretos ocultos, el escenario ideal para explorar esas tensiones es el de una iglesia multimillonaria, donde las reglas morales se entrelazan con los intereses personales y los valores espirituales. Imagina que la cabeza de esa iglesia no es solo un líder religioso, sino alguien con una agenda mucho más grande, ambiciosa y perturbada. Esto es precisamente lo que hace que una serie sobre una familia detelevangelistas sea tan fascinante. Sí, una serie de televangelistas.
El argumento de ‘Los Gemstone’
Así es como se llama esta serie de 2019, ‘Los Gemstone’. Creada por Danny McBride, se centra en la vida de los Gemstone, una familia rica y poderosa de televangelistas. Los Gemstone tienen una megaiglesia que ha amasado una fortuna gracias a las donaciones de sus seguidores, y viven en un mundo donde la apariencia lo es todo.
La familia está encabezada por Eli Gemstone, el patriarca de la familia, interpretado por John Goodman, un hombre cuya vida está dedicada a mantener el control sobre su imperio religioso y a asegurar que sus hijos sigan el camino que él ha trazado para ellos.
Los tres hijos de Eli — Jesse (interpretado por Danny McBride), Judy (interpretada por Edi Patterson) y Kelvin (interpretado por Adam Devine) — son los herederos de este imperio, pero cada uno tiene su propio enfoque y visión de lo que significa ser parte de esta dinastía religiosa. Mientras Jesse se ve a sí mismo como el sucesor legítimo de su padre, buscando expandir el poder de la familia, Judy lucha por ser tomada en serio en un mundo dominado por hombres, y Kelvin, el hijo más joven, intenta encontrar su propio camino mientras se enfrenta a su relación con la religión y su necesidad de validación.
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Lo que hace única a ‘Los Gemstone’ es la forma en que McBride mezcla el humor oscuro con el drama, creando una narrativa que no solo es entretenida, sino también cargada de tensión. Cada episodio nos acerca más a los secretos que la familia ha estado ocultando durante años, mientras los miembros de los Gemstone luchan por mantener su fachada perfecta ante el mundo.
La serie, a su vez, se convierte en una reflexión sobre el poder que la religión y el dinero tienen sobre las personas, y cómo esas influencias moldean las relaciones familiares y personales. Honestamente, a mí me recuerda un poco a ‘Succession’, pero con el tema de la religión como pilar.
¿Por qué deberías ver ‘Los Gemstone’?
‘Los Gemstone’ es una serie que te hará reír y te invitará a reflexionar sobre los temas que aborda. El combo de humor negro, drama y una crítica mordaz a la religión y el poder convierte a la serie en algo mucho más que un simple retrato de una familia rica y problemática. Es una crítica social sobre las instituciones religiosas, la avaricia y las facetas más oscuras de los seres humanos.
Si te gustan las series que no temen mezclar lo absurdo con lo profundo, es una opción perfecta. La serie se mantiene fresca y emocionante durante sus episodios, y te lo prometo, merecela pena.
¿Dónde verla?
‘Los Gemstone’ está disponible en HBO Max, tiene cuatro temporadas completas de nueve episodios de cuarenta minutos más o menos cada uno, lo que es perfecto para un maratón de los de antes.