El triángulo de la juventud: zonas en las que centrar la rutina cosmética para tener una piel hidratada y firme

Los pómulos y la punta del mentón forman un triángulo invertido característico de los rostros angulosos. Expertos nos dan trucos y tratamientos efectivos para mantenerlo firme y terso.

Imaxtree

Olga Tarin

Periodista especializada en belleza.

28 de enero de 2023, 09:03

Todas queremos una piel hidratada, sana y firme. Y es que las arrugas y la flacidez inciden directamente en un término geométrico del que se habla mucho en el mundo de la belleza: el triángulo. ¿Qué es en realidad? "En las personas jóvenes el rostro tiene forma un triángulo invertido, siendo la parte de la barbilla la zona más estrecha y los pómulos la más ancha. Sin embargo, a medida que pasan los años y disminuye la producción de colágeno de forma natural, el triángulo se transforma ya que la piel se descuelga y centra sus dos puntos de base en la parte inferior del rostro", explican los expertos de You Are The Princess.

Por este motivo, es importante centrar la rutina en el cuidado del llamado triángulo de la juventud que está formado por la parte superior de los pómulos y la punta del mentón, es decir, el triángulo invertido mencionado previamente y que comienza a invertirse a partir de los 30 años. A partir de ahí hay que incidir en cosméticos y tratamientos capaces de mantener el ansiado rostro ovalado perfectamente triangulado.

¿Cómo envejece el rostro?

El envejecimiento facial empieza en el esqueleto por eso, si tienes una buena estructura ósea tendrás menos tendencia a la flacidez y a la aparición del temido triángulo. "Empezamos a perder volumen alrededor de las órbitas, en los pómulos y en el mentón. Esto se traduce en la aparición de ojeras, aspecto de cansancio, flacidez de pómulos y descenso de la punta de la nariz. La pérdida de este volumen óseo se acompaña de laxitud en la piel, caída de la parte blanda del pómulo y aparición de surcos nasogenianos marcados, líneas de marioneta (desde las comisuras de los labios hacia el mentón) y acúmulo de tejido en la zona de la mandíbula. Es cuando se forma el triángulo" explica el dr. Joan Birbe, autor del libro 'Manual de belleza facial' (Arcopress).

¿Funciona la cosmética reafirmante?

Sí, pero tienen sus limitaciones. Para la dra. Alicia Merino de Dermik "lo que funciona es cuidar la piel con limpieza, hidratación y protección solar alta. Las pieles jugosas y bien hidratadas son más fuertes y tienen menos tendencia a caer. Después, dependiendo de la edad y de su estado tenemos que darle los activos que necesita. Las pieles jóvenes necesitan hidratar con ácido hialurónico y aplicar ácido salicílico para tratar las imperfecciones. En la treintena es importante incorporar la vitamina C por la mañana para tratar las manchas y dar mucha reparación nocturna. A partir de los 4o el retinol es un activo obligatorio. Transforma la tez, elimina las líneas finas, unifica el tono y la trata. Lo mejor es apostar por rutinas simples pero efectivas". 

Reafirmar con la técnica de ghua sha

Gadgets como los rodillos masajeadores o las piedras ghua sha ayudan a que el producto penetre en las capas de la piel. "También mejoran la circulación sanguínea, abren los poros, tienen un efecto relajante y contribuyen a una piel más firme ya que redefinen los contornos y el volumen facial, ayudando a mantener la apariencia del triángulo de la juventud", afirman los expertos de You Are The Princess. ¿Y cómo se aplica? "Con el borde curvo de la piedra, deslízala hacia afuera y arriba partiendo de la mandíbula. Con el lado plano, masajea la mejilla hacia la sien. Para manejar mejor estas piedras, lo ideal es ayudarse de aceites o cremas ya que así se deslizan con mayor suavidad. Además, potenciarás el masaje si enfrías la piedra antes de utilizarla".

Tratamientos para reafirmar el óvalo facial

¿Es posible mantener una línea mandibular recta, definida y angulosa a partir de los 45? Entre los múltiples tratamientos que hay en los centros de belleza uno de los más efectivos para el contorno es la infiltración de ácido hialurónico. "Nuestro protocolo 'jaw line' es muy efectivo y tiene un resultado súper natural. “Esta técnica consiste en la infiltración de ácido hialurónico Extreme de MaiLi, que esculpe la forma del rostro y reconstruye el volumen facial. Este producto responde a las expresiones naturales del rostro y potencia la línea mandibular. Actúa como un resorte inteligente que se adapta al movimiento del rostro sin perder la capacidad de proyección”, explica la doctora Victoria Paéz, médico estético,

Inductores de colágeno para 'pómulos up'

Mantener alta la línea de los pómulos conservando una expresión natural es posible. Lo mejor es recurrir a inductores de colágeno como Radiesse o Sculptra. "Aportan un efecto lifting inmediato con resultados graduales y progresivos. Esto ocurre porque los inductores promueven la producción de colágeno natural, por eso el resultado máximo se alcanza a los tres meses de realizar el tratamiento. Podemos aplicar el producto con vectores para lograr un efecto tensor instantáneo. Y también podemos hacerlo mediante la técnica de proyección de pómulo cuando falta volumen y buscamos suavizar las depresiones faciales. Es el tratamiento ideal para recuperar el triángulo de la belleza, sin aportar volumen, a la vez que previene y corrige los signos de la flacidez”, explica la dra. Beatriz Beltrán.

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