Vanessa Kirby, la nueva embajadora de Cartier que rivaliza en magnetismo con sus felinos perfumes La Panthère

Es muy fácil caer en clichés cuando se habla de talento. Sin embargo, habría que inventar un diccionario nuevo para poder describir a Vanessa Kirby, esa rara avis que aparece una vez en un millón de años en el séptimo arte cuando nadie lo espera y cuyo impacto se percibe infinito. Así es la actriz inglesa que dio vida a la princesa Margarita en las primeras temporadas de The Crown y así es la nueva y flamante embajadora de Cartier. 

Nacida en Wimbledon, Vanessa parece estar destinada a ganar cualquier partido, sobre todo cuando a lujo y glamour se refiere. Sin necesidad de entrenamiento previo y como si levitar entre alfombras rojas y rodajes fuese algo intrínseco a su ADN, Vanessa es la embajadora de las nuevas campañas de Cartier de joyería, relojería y perfumes. 

Al igual que el animal emblemático de Cartier, la actriz británica sigue su trayectoria con determinación. Un espíritu libre que comparte con la pantera el mismo deseo de independencia. Para la artista, también conocida por sus compromisos filantrópicos, es fundamental ser una misma y avanzar con determinación. “Una pantera no renuncia a sus manchas”, afirma. Indomable y salvaje, la pantera fascina, como Vanessa.

Su destino está vinculado al de Cartier; ya en su época, Louis Cartier apodó a Jeanne Toussaint “la Pantera”. Y fue ella quien le dio forma en 1948 imaginándola en tres dimensiones. Desde entonces, se ha convertido en la encarnación del espíritu creativo y la personalidad de la maison.

Vanessa Kirby aparece en este territorio secreto de vegetación y abundancia, donde coexisten la vitalidad y la belleza del mundo. Guiada únicamente por su instinto, se transforma en un felino, su doble, reflejo de su personalidad, a la vez depredadora y protectora.

Los perfumes felinos florales con más garra

Creada en 2014, esta fragancia devuelve el protagonismo a la familia de los chipres con un nuevo acorde floral felino: la unión de un chipre histórico, un almizcle animal mítico y una gardenia fresca, con una apariencia viva, siguiendo así los deseos de Mathilde Laurent, la perfumista de la maison. Como ella misma confirma: "Toda mujer posee una faceta felina y toda flor alberga notas animales en su corazón".