Hay vestidos que tienen el superpoder de conquistarnos y colarse en el streetstyle de las principales capitales de la moda. Y es que como si siguiera unas coordenadas directas al éxito, Massimo Dutti lo ha vuelto a hacer a través de su reconocible elegancia y estilo.

La firma ha creando uno de esos icónicos casos - que no siempre ocurre - en los que nos rendimos a los pies de una pieza que además de bonita, crea el efecto visual de alargar por completo nuestra figura (añadiendo unos cm extra) y haciéndonos parecer mucho más altas de lo que somos. 

Se trata de un diseño que rebosa calidad y que pasaría perfectamente por una pieza de museo sin estar ligado a los desorbitados precios de las altas firmas. Un vestido con una longitud midi y un estilo camisero que trae rápidamente a la mente una de las grandes tendencias que resiste al paso del tiempo, las camisas.

Acompañado de manga larga, que nos permite trasladarlos del invierno a las noches más fresquitas de la primavera o el verano, sin perder de vista la originalidad - aunque realmente es un clásico - que se presenta en forma de plisado en la parte inferior, este vestido nos evoca directamente la sofisticación propia de la firma catalana. 

El vestido de tablas y su recorrido 

Así pues, y conectando directamente con la estética de los 50 a través del plisado en la parte inferior como sucede con el icónico vestido blanco de Marilyn Monroe diseñado por William Travilla, hasta el emblemático Delhpos de Fortuny.

De esta forma vemos como el legado queda patente hoy y basta con hacer una retrospectiva en la historia de la moda para darnos cuenta de que, desde la antigua Grecia y Roma  donde se originaron los pliegues en la ropa como una forma de darle estructura y elegancia a las túnicas y togas, los pliegues no solo añadían un elemento estético, sino que también permitían un mayor movimiento y comodidad para quienes los llevaban.

Algo que, si trasladamos a la actualidad, se convierte en una característica que resulta clave en la moda contemporánea, donde la premisa es clara: priorizar la comodidad.

El vestido de tablas también alcanzó parte de su apogeo bajo la mano de diseñadores como (los dos franceses) Madeleine Vionnet y Paul Poiret, quienes adoptaron el plisado en sus diseños, creando vestidos que fueron símbolos de la liberación femenina y la modernidad.

Su éxito fue tal que las piezas plisadas se convirtieron en las favoritas de las mujeres de la alta sociedad y de las grandes estrellas de cine de Hollywood, quienes desde aquel entonces hasta ahora, los han llevado a la pantalla grande y alfombras rojas, consolidando así su estatus como una pieza imprescindible que trae consigo éxito asegurado. 

Desde el día a día, hasta las ocasiones más especiales, siempre es un buen momento para lucir este vestidazo y aquí van algunas ideas para sacarle un mayor partido. 

Vestido camisero de tablas

Vestido camisero de tablas

En materia de vestidos, esta pieza pasa el plano de mera prenda, para convertirse en el gran capitán de las piezas de archivo. Y así pues, desafiando el concepto convencional de los vestidos de tablas, Massimo Dutti nos ofrece una nueva versión en tono camisero que alarga por completo la figura, de color camel, con puño cerrado, un corte fluido y bolsillos a la altura del pecho. Desde luego, un acierto asegurado que se adapta a todas las circunstancias y ocasiones. 

Vestido camisero de tablas, de Massimo Dutti
Cuesta 99,95

Completa el look

  • Para la mañana: ya sea una mañana trabajando en la oficina o una mañana de recados, puedes optar por unas sandalias o mocasines en un tono azul bebé. Si quieres trasladarlo a un tono más relajado y sporty chic  puedes optar por unas deportivas metalizadas, que siguen la tendencia del momento, o tus deportivas favoritas. 
  • Para la tarde: puedes llevarlo con unas bailarinas en un tono rosa palo, para darle un tono más romántico o, por el contrario, llevar unas bailarinas con tachuelas que le darán una estética mucho más dark sin perder en ningún momento de vista la elegancia. 
  • Para la noche: añade unos zapatos de salón negros, un clutch de fiesta y una joya llamativa que se luzca ante el tono camel y relajado del vestido. Un acierto asegurado.

Estemos de acuerdo o no, hay piezas que traspasan la barrera del 'capricho' para convertirse en una verdadera inversión que forma parte de la colección de piezas de archivo de cualquier insider de moda. 

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