Meghan Markle y Kate Middleton: toda la verdad sobre su relación

Desde que Meghan Markle llegó a la casa real, los rumores sobre su mala relación con Kate Middleton no han parado. Desde los continuos duelos de estilo que enfrentan a las duquesas, como Kate copiando a Meghan su abrigo más icónico, los rumores de pelea en la casa real, que les llevaron a pasar la Navidad separadas, a la constante búsqueda de pruebas que demuestren que Kate y Meghan fingen su amistad ante las cámaras.

Pero la supuesta enemistad de Meghan y Kate puede no ser tan real como nos han querido hacer creer (de hecho, la verdadera mala relación de la familia real británica es entre Harry y William).

KATE Y MEGHAN, ENFRENTADAS POR LA PRENSA

La revista Hello! publicó el pasado mes de febrero un artículo escrito por Sarah Ferguson, en el que la duquesa de York contaba que "la gente trata de enfrentar a las mujeres (Meghan y Kate) y las compara constantemente de una forma que me recuerda a cómo trataban de vendernos a Diana y a mi como rivales, algo que ninguna de las dos sentimos jamás".

La gran diferencia aquí es que, aunque Sarah Ferguson y la princesa Diana sí tuvieron algún enfrentamiento, Meghan y Kate no han hecho nada que nos lleve a pensar que puedan estar enfrentadas. Más allá de los rumores sobre el fuerte carácter de Meghan, que le llevó a sufrir una crisis con el servicio de palacio, quedarse sin guardaespaldas y perder a su asistente personal (dos veces), las duquesas se han mostrado muy cercanas y amigables en sus apariciones públicas.

La periodista y biógrafa Katie Nicholl explicó en la revista Vanity Fair que "la verdad es que no hay ninguna enemistad entre Kate y Meghan. No están muy unidas, pero tampoco ha habido ninguna gran pelea entre ellas. Kate ha intentado ser amable con Meghan, la invitó a tomar el té en su apartamento el pasado verano, fue muy amable con ella en Wimbledon y le dio consejos sobre protocolo y etiqueta. Creo que ha hecho todo lo que estaba en su mano".

Es cierto que ambas tienen personalidades muy diferentes pero eso no significa que tengan que estar enfrentadas. Simplemente era el gancho o la excusa que necesitaba la prensa. "Dos mujeres jóvenes que resultan ser cuñadas, como lo fueron Diana y Fergie, estaban destinadas a enfrentarse", contó el biógrafo Andrew Morton a Vanity Fair: "Se las compara constantemente de una forma en la que nunca ocurre con los hombres. En muchos aspectos, todo esto dice más sobre la forma en la que tratamos a las mujeres en los medios que sobre cualquier gran enfrentamiento que pueda existir entre ellas".

De hecho, aunque Kate no pudo acudir a la primera baby shower de Meghan en Nueva York, todo indica que ella misma está organizando la fiesta para Meghan que se celebrará en Reino Unido en unas semanas.

HARRY Y WILLIAM, LA MALA RELACIÓN DE DOS HERMANOS INSEPARABLES

Es justamente este afán de los medios por enfrentar a las mujeres el que nos ha desviado de la verdadera pelea en la casa real británica: la de los príncipes Harry y William.

Durante un episodio del programa The Royal View, la biógrafa Katie Nicholl contó que los príncipes tuvieron una pelea que influyó en la relación entre nuestro cuarteto favorito, y el público interpretó que había problemas entre las duquesas. El mito de los dos hermanos eternamente unidos tras la pérdida de su madre hace que sea imposible para la gente pensar que puedan estar enfrentados. Pero no podemos olvidar que se trata de dos hermanos y, como todos, tienen sus roces y sus peleas.

De hecho, la llegada de Kate a la casa real ayudó mucho a mejorar la relación entre Harry y William. "Cuando William decidió por fin casarse con Kate, la pareja de hermanos se convirtió en un trío", explicó Katie Nicholl en un artículo para Vanity Fair: "Bromeaban diciendo que harry era la rueda de repuesto pero, en realidad, estaban muy cómodos. Creo que fue la esperanza y la expectación de que el trío se convirtiera en un cuarteto lo que conquistó a la prensa".

WILLIAM NO APROBABA LA RELACIÓN DE HARRY Y MEGHAN

Por eso, cuando Harry presentó a Meghan a su familia, esperaba ilusionado la aprobación de su hermano. Pero, en su lugar, recibió una advertencia, lo que le hizo sentir que no tenía el apoyo de la persona que más le importaba.

"Durante los primeros meses de la relación entre Harry y Meghan, antes del anuncio de su compromiso, William habló con Harry para asegurarse de que sabía dónde se estaba metiendo y le pidió que se tomara las cosas con más calma", contó Nicholl a Vanity Fair. "Me dijeron que la primera vez que Harry llevó a Meghan al palacio, estaba desesperado por conseguir la aprobación de Kate. Quería que ella y Meghan se convirtieran en amigas y aliadas. No creo que nunca se le pasara por la cabeza que quizás no tendría el apoyo incondicional de su hermano". Incluso el príncipe Carlos tuvo que hacer de mediador entre sus hijos.

Pero finalmente fue Kate quien ayudó a Harry y a Meghan a calmar las aguas y conseguir crear un buen ambiente en la casa real. "No siempre ha sido fácil, ha habido peleas en la casa real, pero Harry y Meghan querían acabar en buenos términos y Kate ha estado haciendo un gran esfuerzo en este sentido", contó una fuente a Vanity Fair. "Kate no tiene ningún problema con Meghan y le ha dejado claro en varias ocasiones que puede acudir a ella para cualquier cosa que necesite".