Glenn Close, ganadora del Globo de Oro a Mejor actriz de drama por La buena esposa, ha sido la protagonista del momento feminista de la noche de los Globos de Oro. La intérprete ha aprovechado su tiempo de agradecimientos por el galardón recibido para animar a las mujeres a buscar la “plenitud personal y perseguir sus sueños”.
Con el premio en la mano, la actriz, visiblemente emocionada, confesó que estaba pensando en su madre, quien a sus ochenta años le reconoció que había dedicado su vida al cuidado de su marido y nunca se había sentido realizada. La intérprete asegura que de esa experiencia aprendió que las mujeres, a pesar de ser madres y criar a sus hijos tienen la obligación de encontrar en la vida cosas que las llenen y perseguir sus sueños. Las mujeres, dice "tenemos que pensar quiero hacer esto y tengo el derecho de hacerlo".
Dada la fuerza del discurso feminista que la actriz pronunció, muchos de los asistentes se pusieron en pie antes incluso de que Close terminase y alzase su premio. La emotividad de su intervención se acentúa cuando sabemos que a sus 71 años, la actriz lleva 45 dedicándose a esta industria.