Este mes se acaba Killing Eve. La última temporada de la serie, protagonizada con dos de las actrices con más química que ha dado la pantalla –Sandra Oh y Jodie Comer–, promete momentos complicados, pero también mucho humor.
Y esperemos que un final a la altura de todos los grandes subidones de adrenalina que nos ha dado la serie. A nosotros pero, sobre todo, a una de sus protagonistas, Jodie Comer. La actriz británica, que en Killing Eve interpreta a la psicópata Villanelle, se destapó como una intérprete versátil y hasta icono de moda a raíz de la globalización de la serie. Pero la historia de Jodie se remonta a mucho antes de Killing Eve, concretamente a 2008, cuando esta actriz nacida en Liverpool y criada en una escuela estrictamente católica, comenzó a ‘picotear’ pequeños papeles en televisión. Tenía 15 años y no paró de trabajar hasta 2017, cuando le ofrecieron uno de los papeles principales en la serie que la encumbraría y la haría mundialmente conocida. Un año antes había sido elegida una de las estrellas del mañana en el Festival de Londres, lo que demuestra que el jurado tuvo muy buen ojo.
Y con Killing Eve llegaron más reconocimientos: Bafta, Emmy, TV Choice Awards…Una envidiable colección para una chica que en sus comienzos se ganó las lentejas trabajando en un supermercado y que admite que, de pequeña, lo que más le podía gustar era montar un drama por nada. No sabemos si le ha quedado algo de aquello, pero sí que ahora le gusta, y mucho, es Bruce Springsteen –y el actor Paul Reed, su amor platónico– y que es capaz de calcar los acentos que le propongan. También que, por lo que tenemos entendido, aún comparte casa con sus padres (él es masajista de un equipo de fútbol) y su hermano, que trabaja de analista. Jodie, para quien una de sus debilidades es comprar ropa, compartió hace nada película con Matt Damon, Adam Driver y Ben Affleck (El último duelo) y también con Ryan Reynolds (Free Guy).
En enero, Movistar+ estrenó uno de sus films más peculiares, Help, donde interpreta a la trabajadora de una residencia de ancianos que ama lo que hace pero cuyo mundo se tambalea cuando llega la pandemia del coronavirus. Esperando verla de nuevo en el remate de Killing Eve que se estrena este mes en HBO Max, nos hemos enterado que a última hora abandonó la película que Ridley Scott prepara sobre Napoleón (ella hubiera sido la emperatriz Josefina). Pero no estará desocupada: el West End británico la espera de abril a junio protagonizando la obra de teatro Prima Facie. El cine puede esperar.