Comprar sin pensar, de manera desenfrenada y acumular ropa. Éste es un problema muy común para una buena cantidad de personas. Nos animamos a gastar dinero en prendas que terminan en el fondo de nuestro armario, y alguna vez (más de las que nos imaginamos), ni siquiera llegan a ver la luz. Esto nos ocurre porque no sabemos comprar y nos lanzamos a hacernos con piezas simplemente porque nos gustan. Un error básico que se puede solucionar fácilmente. ¿Solución? Cuando nos enamoremos de una prenda a golpe de vista deberíamos pensar cómo, cuándo o dónde la vamos a llevar antes de dar el paso de adquirirla.
Si llevas años cometiendo este fallo y tu armario ya es una amalgama de ropa donde no encuentras nada, hoy vamos a echarte una mano. Vamos a explicarte algo que creías imposible: reducir tus prendas y complementos a tan solo 10 básicos con los que podrías pasar del día a la noche. Su versatilidad hará que puedas lucirlos a horas y situaciones muy diferentes entre sí.
El truco reside, en parte, en los colores. Si te cuesta decidir qué ponerte, puede que sea porque no tienes muy claro cómo combinar algunos. Por esta razón, nuestros 10 imprescindibles apuestan por los tonos neutros que giran sobre todo en torno al blanco y negro. Sabemos que vestir siempre así no es lo típico pero, si consigues entender qué ítems y tonalidades son los más básicos aprenderás a combinarlos con otras prendas y complementos mucho más complicados, y sin fallar en el intento.
Otro 'tip' que es importante entender a la hora de vestirnos correctamente y con estilo es que, en general, todo se puede llevar para todo. No hay reglas y si las hay, te las marcas tú. La única premisa a tener en cuenta es ser fiel a ti misma. ¿Con qué te sientes mejor? Aunque te guste un vestido muy escotado, debes preguntarte: ¿me visualizo cómodamente con él sobre mi piel? así que, regla number one: encontrar tu estilo. Y la number two: no querer ser otra persona. Ahí reside el secreto de todo éxito.
Para lograrlo, en realidad, solo se necesita la intención de hacerlo y un poco de práctica. Las americanas y las faldas lápiz pueden lucirse fuera del trabajo de manera desenfadada; es posible combinar unas zapatillas Converse con un traje de chaqueta y pantalón; y las mochilas que muchos llevan para ir al colegio o la universidad también pueden ser llevarse con sofisticación. Atrévete, mírate al espejo, reconócete... ¡Y a por todas! Para comenzar, te decimos cuáles son las prendas que funcionarán como el as bajo tu manga.