Miriam Núñez Del Bosque
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Todavía recuerdo aquellos famosos botines de Chloé, con tachuelas y hebillas, que nacieron en el otoño de 2008 con el nombre de Susanna. A partir de entonces, una multitud de celebridades fueron vistas con ellos: Sienna Miller, Kate Bosworth, Diane Kruger, Nicole Richie y Lily Aldridge, entre otras. Aquellos zapatos fueron el objeto de deseo esa temporada (y las siguientes), todos querían tenerlos en su armario, ya fuera en su clásico color negro o en rojo.
Por otro lado, las botas Hunter (marca fundada en 1856) también tuvieron su época dorada, sobre todo entre las británicas. Kate Moss, Poppy Delevigne y Alexa Chung, las vestían cada año en el Festival de Glastonbury. Y, entre la realeza, la princesa Diana llevó en 1981 uno de sus modelos en color verde, las Original Green Wellingtons (ahora conocidas como la bota original u Original boot). En cambio, Kate Middleton siempre ha preferido las botas de agua de Le Chameau.
Stella McCartney colaboró con Hunter en 2019, juntos presentaron una colección en la semana de la moda de París, vegana y sostenible, que anticipaba la tendencia que vendría en 2020. Este Otoño-Invierno la presencia de las botas de agua vuelve a ser notable, lo vemos en grandes firmas como Loewe, Bottega Veneta, Chloé, Jimmy Choo o Burberry. Además, marcas muy conocidas de fast fashion como Zara o Mango, ya han sacado varios modelos para no quedarse atrás.
Además de un estilo muy british, otra tendencia de esta temporada son las botas militares, con grandes volúmenes y suelas de goma con plataforma. Se llevarán, sobre todo, en color negro o en negro y blanco. Las veremos tanto en su versión con cordones, las cuales se intentarán asemejar al modelo con bolsillos de quita y pon de Prada, o al estilo Chelsea.
Las botas altas tendrán una caña bastante ancha y se llevarán con blazers oversized, vestidos cortos, shorts de invierno o faldas (ver Matilda Djerf). Se distinguirán por su estética depurada y minimalista. También veremos vestigios de tendencias anteriores como las botas cowboy aunque, en esta ocasión, se presentan con una altura mayor y sin bordados o estampados. (Es hora de enterrar esta moda ya trasnochada).
Los mocasines y zapatos planos vivirán un auge anunciado, agradaron en la temporada Primavera/Verano y ahora lo hacen este otoño, con modelos más sobrios que emulan una apariencia clásica y otros que buscan ese toque diferenciador y actual con hebillas llamativas o detalles joya. También vuelven los cordones y nos olvidamos de los mocasines con plataforma.
En cuanto a zapatillas, se ve una predilección por el cierre con velcros (al estilo Louis Vuitton en su colección Fall Winter 20/21). Este tipo de modelos también se pueden conseguir en Adidas, Veja, Reebok o Sandro Paris. Además, seguirán presentes las icónicas New Balance Made in US 990v5.
Y, para acabar, nos vamos hasta las estaciones de esquí, donde se ha formado otra tendencia: las botas de après-ski. Este tipo de calzado que hace unos años era exclusivo de las pistas, su actividad y ocio, hoy se ha mudado a las calles. Este deporte ha tenido un gran apogeo estos últimos años (sobre todo en 2019) por lo que no era de extrañar que, tanto su equipación como las prendas de nieve, siguieran el mismo camino. Moncler lleva siendo referencia muchos años pero esta temporada, el atractivo de su colección y su acercamiento a un publico más general, le está asegurando el éxito.