In & Out: 5 tendencias que vienen pisando fuerte y 5 que se despiden

Hace unos días hablábamos de los colores que más veremos esta primavera/verano 2021, como el hot pink, el amarillo limón o el azul maya ya habían conquistado las pasarelas y se preparaban para hacerlo con las calles. Zara los presentaba en su nueva colección denim y también en varios vestidos de tirantes, bodies y blazers.

Las tendencias son algo curioso pues (normalmente) se gestan durante un tiempo antes de que las vistamos, primero son las firmas quienes las exhiben en sus desfiles, después llega el tan amado street style para acercarlas a un público más extenso y, una o dos temporadas más tarde, las observamos caminando por Gran Vía, Velázquez o Santa Engracia.

Algunas de estas modas pueden ser realmente fugaces y otras, se arraigan durante años (los pitillo, aunque ahora de capa caída, son un ejemplo). Recuerdo el bolso Le Chiquito de Jacquemus, un boom bastante efímero que duró escasamente unos meses. Al otro lado tenemos el talle alto, el cual sigue vigente tras años de supremacía.

La volatilidad de algunas tendencias hace que en incontables ocasiones nos arrepintamos de su compra. Suele ser un error adquirir prendas o complementos de gran popularidad solo por el hecho de estar de moda. Por eso, antes de pasar al tema que nos incumbe hoy, me gustaría expresar una opinión que tengo al respecto.

Porque algo no se lleve actualmente, no implica que debamos deshacernos de ello (recordad que todo vuelve). La moda no es algo que siga unas reglas fijas e inalterables, su verdadero sentido es la expresión personal de cada individuo a través de la ropa. ¿Qué gracia tendría si todos vistiéramos exactamente igual?Leandra Medine (Man Repeller en su época) es un ejemplo de ello. Muchas de las cosas que llevaba cuando empezó escandalizaban y provocaban comentarios negativos (algo que sigue pasando incluso a día de hoy). ¿Qué hubiera ocurrido si por ello hubiera dejado de vestir como quería para seguir las tendencias o la norma de estilo? Nos hubiéramos perdido una fuente de inspiración peculiar y altamente valiosa.

Con esto quiero decir que ser fiel a uno mismo siempre es un acierto, ya sea invirtiendo y arriesgando con las tendencias de nueva temporada (o prendas fuera de nuestra zona de confort), como manteniendo nuestro estilo de siempre.

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Los 6 colores que dominarán las calles esta primavera/verano 2021

Y, volviendo al tema de este artículo, hay varias tendencias que veremos esta primavera/verano 2021 y otras que desaparecen. Para no hacerlo excesivamente largo hablaremos de 5 y 5.

IN: LAS TENDENCIAS QUE VIENEN

1. En primer lugar, tenemos los sets o conjuntos. Este tipo de prendas las llevamos viendo un tiempo en tienda (sobre todo en Zara) y parece que seguirán presentes un largo tiempo. Para los meses de más calor se apuesta por los shorts o las faldas y en tejidos ligeros como el lino o el algodón.

2. El denim es otro de los grandes protagonistas, sobre todo lo veremos en monos y petos. Es difícil encontrar una marca que no haya sucumbido ya a esta tendencia. Otra cosa que veremos mucho es el denim sobre denim, chaquetas y pantalones vaqueros combinados.

3. Y no pueden faltar los complementos sporty como las gorras. Esta moda comenzó en otoño de 2020 y la seguiremos viendo en verano. Como más se ven son combinadas con blazers y prendas elegantes como pantalones de traje. Una marca que ha sabido captar esta tendencia de forma maravillosa es Bleïs Madrid y también debo nombrar a Scalpers.

4. Llevaremos jerséis esta primavera/verano 2021 pero será sobre los hombros. Ya se lo hemos visto a Sofía Paramio, Matilda Djerf, Emelie Lindmark y a Blanca (de Bleïs Madrid), entre otras.

5. Los bolsos de color blanco han causado y seguirán causando furor. Desde el famoso Padded Cassette de Bottega Veneta hasta el Cleo de Prada.

OUT: LAS TENDENCIAS QUE SE VAN

1. El print de leopardo deja paso a otros tipos como el estampado de cebra o vaca. También seguiremos viendo tie dye, rayas y cuadros simples de colores pastel.

2. El vichy parece que muere de éxito y, tras varias temporadas siendo líder, pasa a un segundo plano. Esto suele ocurrir en muchas ocasiones cuando una tendencia se explota en exceso.

3. Las riñoneras fueron un boom prodigioso, pasaron de ser un complemento casi marginal a ser el accesorio de moda. Aun así, su éxito no podía durar para siempre y hoy vemos cómo caen lentamente en el olvido.

4. Las blusas exageradas, con volantes, lazos, mangas abullonadas y volúmenes excesivos dejan paso a una camisa más sencilla. Los cuellos bobo seguirán presentes pero sin tanto éxito como este otoño/invierno. Veremos bordados, colores blancos, crudos y pasteles, rayas y estampados florales.

5. Las chaquetas bomber llevan un tiempo perdiendo interés, esta primavera/verano parece que se verán sobrepasadas por las blazers, las cazadoras vaqueras, los chalecos y las sobrecamisas.

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