"Hay algo en el aire que da esperanzas de que esto sea el principio de un cambio", aseguraba anoche Penélope Cruz, en el photocall previo al estreno VIP de Loving Pablo. La actriz marcó el dress code de la noche (que no todas cumplieron...) en riguroso negro, el color que han adoptado los movimientos reivindicativos feministas Time'sUp y Me Too. Un diseño de Balmain con el que rompe su idilio con Versace de sus últimas apariciones públicas.
Penélope, con el #8M
La actriz, que interpreta a una hipnótica Donatella Versace en la segunda temporada de la serie American Crime Story, quiso poner voz a las luchas por los derechos de la mujer: "Hay cosas que aunque estamos en el 2018 no se han conseguido… y cuando yo hablo nunca lo hago refiriéndome sólo a mi industria o a mi profesión, a las mujeres de otras profesiones que no son cara al público nadie les pone un micrófono cerca para expresar en qué situación están, qué injusticia puedan estar viviendo. Lo nuestro sí tiene que servir para poner luz ahí en esas otras profesiones".
Penélope aseguró que el día 8 de marzo ella también se sumará al paro, "como vamos a hacer todas". Y continuó: "Me parece importantísimo que se haga, estoy a favor, voy a hacerlo, eso algo más que simbólico, granitos de arena que van sumando".