Robarle la camisa a nuestro chico no es una mala idea y lejos queda de ser una alternativa casera. La tendencia promete arrasar en primavera porque resulta cómoda y relajada y al mismo tiempo sofisticada y elegante.
Los cuellos de la camisa endurecen nuestro rostro y marcan nuestras facciones y, al mismo tiempo, si llevamos desabrochados los primeros botones, marcaremos clavícula y luciremos un atractivo escote. Dichas estas cosas parece que las camisas para él están más pensadas para nosotras.
Pero no es así del todo. ¿Por qué? Porque el tejido del que están hechas las camisas casual de hombre suele ser muy rígido y a las mujeres nos arma demasiado. Por eso es importante que te decantes por modelos como los que te mostramos más arriba. A excepción de la opción de Zalando, todas son bastante caídas y pueden estilizar bastante nuestra figura.
La versatilidad de las camisas masculinas
Lo mejor de todo es que, si bien ellos pueden llevarla unicamente de dos maneras (cerrada o abierta) las mujeres contamos con mil alternativas distintas. Aquí van algunas propuestas:
- Desabrochada a modo de chaqueta: con una camiseta básica debajo. Escoge la forma del escote que mejor te va.
- Abrochada con un pantalón pitillo: acompaña el look con manoletinas, mocasines o zapato de salón para las citas más elegantes. Lleva una cartera de mano y no un bolso cruzado para no chafar el conjunto.
- Anudada al frente: gracias al largo de las camisas masculinas, podemos jugar con ellas de mil maneras distintas.
- Como vestido: ponte la camisa con un cinturón y combínala con los botines tipo cowboy que ahora son tendencia.