Aunque muchos de nosotros todavía sigamos trabajando, hay un número elevado de personas que ya están disfrutando de la playa, de los cócteles (en una hamaca a orillas del mar), de paellas en el chiringuito y de caminatas nocturnas por los paseos marítimos. No sé si es de mala educación que cuelguen ciertas fotos veraniegas en Instagram o nos ayuda a seguir soñando con esas vacaciones que están por venir.