Las tachuelas tienen su origen en el extravagante movimiento punk. ¿Quién iba a decirles a aquellos jóvenes rebeldes que uno de las claves de su vestimenta pasaría a la historia, rompería las barreras de la reivindicación y se asentaría como uno de los apliques básicos de las prendas más elegantes y femeninas?
A día de hoy no hay it-girl que se resista a esta tendencia. Valentino se ha convertido en el portador del aplique por excelencia. Sus bolsos y zapatos de salón están plagados de estos detalles brillantes y sus modelos han sido imitados y versionados por distintas marcas alrededor del planeta. Las tachas no son solo para el invierno, como ves en la imagen de la periodista, pueden quedar genial, también en primavera con una gabardina sencilla.
¿Cómo llevar bolsos con tachuelas?
Una de nuestras premisas inciales es la de combinar bolsos con tachuelas con prendas bien lisas, o bien con un patrón muy definido. Quizá sea mejor llevar un bolso como el de Sara Carbonero con un mono con a rayas sobre fondo blanco que con un vestido plagado de motivos florales que no siguen un orden marcado. De esta forma cuidamos la limpieza del estilismo en su conjunto y mantenemos su armonía y su uniformidad.
Por tor lado, recomendamos tener siempre en cuenta el color de las tachuelas. Nos gusta prestar atención a las combinaciones pensadas por lo que, si tu bolso lleva tachas en plata, quedará mejor si lo combinas con un cinturón que tenga la hebilla del mismo color y que, si llevas joyas, las luzcas en el mismo tono. No es un requisito imprescindible pero para nosotras es una clave de estilo importante. Hay accesorios que aunan el oro y la plata y estos nos pueden ayudar a salir del aprieto de llevar ambas cosas al mismo tiempo.