Está demasiado extendida la idea de que los looks de oficina son demasiado formales, pero esto no siempre tiene por qué ser así. Ir a trabajar suele requerir cierta elegancia y decoro, pero eso no quita que podamos vestir con mucho estilo.
Hoy, nuestra estilista Ana Romé va a ayudarnos a hacer caer ese mito de que los looks de oficina son demasiado formales. La clave, tal como ella nos explica, reside en ''saber conseguir ese punto trendy y arriesgado pero en su justa medida''. Aunque, como todos sabemos –y Ana también lo reconoce–, esto no es nada fácil.
Las opciones válidas para triunfar con este tipo de conjuntos son casi infinitas. Los clásicos trajes –ya sean de chaqueta con pantalón o con falda– son la apuesta segura de muchas mujeres a diario. El problema es que muchas veces no lo combinan como es debido y terminan creando estilismos planos. El truco está, como en muchas otras ocasiones, en los complementos. Unos zapatos llamativos, un bolso original o simplemente algunas joyas que te hagan brillar con luz propia pueden salvarte en más de una situación y en nuestra galería te lo demostramos.
Otro mito que queremos desterrar es el de los tacones. Ir siempre con stilettos o salones a trabajar es un concepto ya anticuado. Unos mocasines, unas sandalias o incluso unas sneakers pueden convertirse en tu mayor aliado. Y, todas ellas con algo en común. Son zapatos planos y muy cómodos que te permitirán aguantar las jornadas más largas. Además, si prefieres un término medio –nunca mejor dicho–, los tacones midi, tan fáciles de llevar, cada vez cobran mayor importancia en la moda. Por eso verás como adaptarlos a tu look de oficina es de lo más sencillo.
Estos son solo algunos trucos que aprenderás al ver los cinco estilismos (uno para cada día de la semana) que hemos creado para ir a trabajar con mucho estilo. Entra en la galería y, ¡descúbrelos!