El vestido negro es un básico de fondo de armario que nos ha acompañado a lo largo de nuestra vida en nuestros eventos más formales, cuando más elegantes y perfectas queríamos estar. Una prenda asociada a las noches especiales y citas importantes, no siempre ha tenido esta connotación. Hasta que Coco Chanel no la convirtiese en lo que es ahora, allá por los años 20, quedaba relegada como uniforme del servicio, de la clase más pobre, o de luto.
Ahora ya no nos imaginamos un buen fondo de armario sin uno de ellos en él. Siete de cada diez mujeres considera al LBD una prenda clave y especial de todas las que conforman su vestuario. Además han formado parte de la historia y muchos de ellos aún son un icono de estilo. ¿O quién no se acuerda del vestido negro de Hubert de Givenchy que defendió Audrey Hepburn mejor que nadie un frente al escaparate de Tiffany’s en Desayuno con diamantes? Uno de los modelos más imitados e inspiradores que conocemos al que incluso el SCAD Museum de Georgia le dedica una exposición comisariada por André Leon Talley.
Vente-Privee ha lanzado esta colección en uno de los mejores momentos del año, ya que, según un estudio que ha realizado la propia marca, el 60% de las españolas planifican con antelación sus estilismos navideños y compran alguna prenda para estrenar en estas fiestas. Además, muchas de ellas indicaba que su look perfecto navideño estaba compuesto por un vestido tipo cóctel, como los 9 que te hemos mostrado anteriormente. Aunque ya hemos visto que puedes estar perfecta con los vestidos de fiestas largos en clave low cost o con los vestidos con lentejuelas con los que serás la más brillante de la fiesta, pero si lo que quieres es apostar por la elegancia, versatilidad y buen gusto para las fiestas que vendrán, el tuyo es el Little Black Dress.