La falda pareo, aquella que parece envolverte hasta recogerse en el lateral, toma por asalto la vida urbana para convertirse en un must imprescindible. Su corte asimétrico y justo por debajo de la rodilla exige la compañía de unas sandalias con tacón. Si además optamos por sandalias acordonadas, el resultado no podría ser más sexy, sofisticado y brillante.