La playa (aunque sean las más bonitas de España) no es para todos. Da igual la que sea, si no eres de playa, NO ERES DE PLAYA. Si es de piedras, porque son incómodas, es duro entrar en el agua, es duro tumbarse y disfrutar del baño de sol. Si son de arena, porque estás llena de arena todo el rato, que acaba abriéndose camino y metiéndose hasta en el hipotálamo. No hay nada que se escape a la conquista del grano de arena.
Por eso es importante saber que hay más opciones de 'ocio en el agua' a parte de la gloriosa playa. Y ahora, después de esta ola de calor que aún estamos dejando atrás y a la espera de las que están por venir, el baño es un imprescindible en nuestra agenda de lo que queda de verano.
De hecho, las ciudades grandes ya están vacías, y en plena temporada alta de vacaciones, las opciones se abren como un inmenso abanico de frescor, y nosotros solo os hemos dado unas ideas, pero hay muchas más.
REFRESCARSE EN EL INTERIOR DE ESPAÑA
Las piscinas municipales de los diferentes pueblos son la opción principal. Un baño sin salir del municipio a precios económicos. Una nevera y unos bocatas, o gozar del bar de turno, si es que la piscina lo tiene. También están las piscinas privadas que nos supone un gasto mayor pero que nos suelen brindar unas instalaciones de lujo.
Pero si lo que quieres es refrescarte gratuitamente y en medio de la naturaleza, están los ríos con sus pantanos y sus piscinas naturales. Todo es buscar y encontrar el lugar que más te apetezca y vaya contigo.
Pasar calor es cosa tuya este verano, las opciones las tienes frente a tus narices.