La serie que recoge las andanzas de la siempre maravillosa señora Maisel llega a su fin con la quinta y última temporada (apunta fecha: 14 de abril en Prime Video). Y no se nos ocurre mejor forma de hacerle los honores que volviendo a verla desde el primer capítulo. Porque si te pones con el primero ya no podrás parar (tenlo en cuenta para organizar tu vida). Y para incorporar, además de esta serie, todos los estrenos de abril.
Recordemos cómo empezó la cosa: la señora Maisel del título (inmensa Rachel Brosnahan) estaba casada con un señor aspirante a cómico y ambos componían la perfecta familia judía del Upper East Side neoyorquino –vale, en el concepto familia habría que incluir a los padres de ambos y a los dos hijos de la pareja, que donde comen dos comen ocho–. A ella los guiones que pergeñaba su santo esposo como que ni fu ni fá, así que empezó a rehacerlos.
Poco tardó en dejarse picar por el gusanillo de la actuación. A partir de este momento todo se precipita: su ejemplar marido le pone los cuernos, la pareja se divorcia y ella decide que va a dedicarse profesionalmente a la comedia.
Pero no es fácil ser cómica en los años 50, así que la Señora Maisel deberá hacer derroche de talento a horarios intempestivos y en lugares insospechados. Siempre acompañada de su inseparable representante Susie (personajazo) y su familia, propia y política, que el clan judío no se disuelve por mucho divorcio que intente dinamitarlo.
![La maravillosa señora Maisel](data:image/svg+xml,%3Csvg xmlns="http://www.w3.org/2000/svg" viewBox="0 0 900 600"%3E%3C/svg%3E)
D.R.Midge y su suegro en la hora del té.
La sinopsis de la última temporada está todavía por ver, pero crucemos los dedos para que vuelva Lenny Bruce, el cómico al que vimos en la ficción interpretado por Luke Kirby y que, cosas de la vida, existió en la realidad. Sería un lujos que le dieran un papel destacado.
Y recordemos también que a nuestra querida Susie Myerson (Alex Borstein) la dejamos en una nueva aventura empresarial, así que la curiosidad es máxima por saber cómo se lo monta. O cómo resuelve Joel Maisel sus problemas domésticos con Mei. Lo que sí parece cierto es que todo el reparto principal está de regreso, incluidos padres y consuegros que son lo más. Y que Midge Maisel va a continuar haciendo gala de esos maravillosos looks made in 50’s que nos tienen ojipláticas.
Si Emily in Paris viviera a mediados del siglo XX probablemente no haría comedia, pero seguro que versionaría alguno de los trajes de nuestra adorada Midge.