Transformar espacios, combinar colores, redirigir la luz.... Todos estos recursos te ayudarán a darle un aire diferente a tu hogar. Sin obras y modificando tan solo pequeños detalles. Apúntate ya a nuestras reformas inteligentes y te prometemos que pronto presumirás de casa con estilo.
- Reinventa espacios. Por ejemplo: tal vez tu apartamento sea demasiado pequeño para permitirte tener tu propio despacho. Aun así, no renuncies al “lujo” de crear un rincón personal de trabajo. Lo ideal es utilizar una ventana donde situar una mesa, una silla y una lámpara. Sin más. Psst.. Eso sí, juega con los tonos claros para sumar luminosidad.
- Aboga por las fotos. Si son en blanco y negro no solo proporcionarán un evocador toque vintage; también son un elemento a tener en cuenta si lo que quieres es decorar una pared con color. El proceso es fácil: pasa
tus fotos favoritas a blanco y negro con ayuda del ordenador y elige marcos de diferentes tamaños (¡incluso de formas!). Después, juega a hacer composiciones geométricas en la pared, colócalas sobre una balda o emplea una estantería en forma de escalera.
- Ilumina. Una buena forma de amplificar la luz natural es reflejar la que entra por las ventanas. ¿Cómo? Lo más sencillo es recurrir a los espejos. Si los colocas en los lugares adecuados, conseguirás multiplicar el efecto, haciendo que la estancia parezca más grande y, sobre todo, más profunda. Tampoco es ninguna tontería forrar las puertas del armario con espejos; ¡ya verás qué cambio! Si no quieres redundar el “efecto espejo”, ilumina artificialmente aquellos puntos que quieras destacar, tales como vitrinas, aparadores… Crearás nuevos focos de atención y conseguirás cambiar la percepción de los espacios.
Y recuerda que el color también ayuda a reflejar la luz. El blanco es la estrella, pero los tonos arena no se quedan atrás. Empléalos en las paredes y también en los muebles e incluso en los suelos (si te decantas
por la madera, que sea clara).