Para su maquillador y peluquero de cabecera, Gabriel Llano, la actriz ha vivido durante el último año su evolución estética más interesante. “Tras rodar Solo química quiso cortarse la melena y teñirse de rubia. La veo mucho maás sexy. Ha pasado de niña a mujer”, dice. En cuanto a maquillaje, “ella prefiere marcar el ojo, pero a mí me encanta su boca y, a veces, opto por el rojo de labios para cambiar”, afirma Gabriel. Con labios rojos o no, Ana es hoy todo un referente de estilo y belleza.
Pero, sin duda alguna, es su actitud arrolladora y cargada de seguridad y confianza lo que le hace tan especial. Además de sus cambios en el pelo y estilo de maquillaje, Ana destaca por su ropa fetiche: prendas cómodas pero muy chic, blus fluídas, vestidos largos y culottes holgados con camisetas básicas. Un estilo muy natural y favorecedor.
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