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Sueñas con unas pestañas de escándalo pero crees que un rizador de pestañas no sirve de nada y únicamente te cubres las pestañas con rímel en busca de longitud y volumen... si es así estás muy equivocada. La unión de ambos productos puede convertirse en tu truco beauty estrella para conseguir los resultados que estás buscando, los dos productos funcionan mejor juntos.
Ya tengas pestañas rectas o la suerte de tener un poco de rizo natural, solo unos segundos con el rizador ayudará mucho a preparar el escenario para lucir unas pestañas increíbles, sin necesidad de extensiones ni pestañas postizas.
Los rizadores de pestañas han ido poco a poco mejorando y evolucionando, convirtiéndose en un imprescindible beauty para los profesionales. Pero, ¿cómo se utiliza exactamente? El maquillador de Chanel, Tyron Machhausen, nos lo explica en unos sencillos pasos.
"Abre el rizador de pestañas y coloca su tira de goma en la raíz de las pestañas superiores", explica. "Asegúrate de que todas las pestañas, especialmente las externas, estén dentro. Con el rizador en posición vertical, ciérralo suavemente en la base, lo más cerca posible de la línea de las pestañas y asegúrate de no pellizcar tu piel. Aprieta ligeramente el rizador desde la raíz hasta las puntas de las pestañas con la misma presión", concluye Machhausen.
En el mercado beauty ahora encontrarás una amplia variedad de rizadores que se adaptan a todas las formas y sensibilidades de los ojos, diseñadas con un ajuste más cómodo y de fácil uso. Dicho esto, vale la pena señalar que no todos los rizadores de pestañas son iguales. Por ello, hacemos un rastreo de los mejores rizadores que puedes comprar para conseguir las pestañas de tus sueños.