El corte bob llegó a principios del siglo pasado para quedarse. Fue en Francia en 1909 cuando al peluquero polaco Antonie se le ocurrió la brillante idea de crear un corte de pelo a la altura de la mandíbula que a lo largo de los años ha evolucionado hacia otros largos.
El long bob o lob, con un largo que casi llega al pecho, es el corte de pelo al que más suelen recurrir las famosas como Sara Carbonero, por ser el más cómodo de mantener. El lob roza los hombros y el blunt bob es la versión más desenfadada de peinado bob: capeado y corto, como lo lleva Olivia Wilde.
Lo sabemos, dar el paso de cortarse el pelo da un poco de miedito. “¿Y si no me queda bien?” es la pregunta que nos hacemos todas. Pero cuando nos arriesgamos merece la pena porque si de algo no hay dudas es de que cuando llegue a tu vida el bob, lo hará para siempre.
Por qué vas a caer rendida ante un corte de pelo bob
- Porque es perfecto para todas edades. A todas nos sienta bien, de hecho, el corte bob es de esos que quitan años y te rejuvenecen al instante a golpe de tijera.
- Porque es cómodo en cualquier época del año. Da igual que haga frío o haga calor, el corte bob se adapta a la primavera, verano, otoño y el invierno.
- Porque se puede reinventar. Cuando te aburras, puede evolucionar a un corte de pelo nuevo con capas largas, cortas, flequillo, sin él…
- Porque hay infinidad de peinados bob. Con mucho volumen al estilo años noventa, liso tabla como Kim Kardashian o rizado como la top model Ana Arto.
¡Que no hay excusas que del corte bob no te vas a hartar!