¿Dónde hacen el mejor rubio? ¿Y las balayage más sutiles? ¿Quién corta bien el pelo? ¿Y una puesta a punto completa? Seguro que en algún momento te has hecho estas preguntas, lo has hablado con alguien o, directamente, te ha saltado en redes la imagen de una actriz o influencer luciendo la melena que tú estabas buscando. Conscientes de estas cuestiones (porque a nosotras también nos han surgido), hemos seleccionado las peluquerías de la capital donde aciertan de lleno con las diferentes especialidades capilares. Algunas te sonarán por su clientela famosa. De otras no habrás oído hablar, pero no las pierdas de vista porque las editoras de belleza sabemos que son la crème de la crème. Añádelas a tus direcciones favoritas.
El mejor rubio
Quienes confían en el estilista David Lorente (C/García de Paredes, 76) saben que dejan su melena rubia en buenas manos. Antes, durante y, sobre todo, tras el verano, el momento crítico para estos cabellos. David, según su clientela (entre la que se encuentran conocidas periodistas de belleza), es el único que bloquea el anaranjado y los tonos indeseados y crea los matices más puros y naturales. ¿La gran diferencia? Su técnica es absolutamente personalizada y se convierte en un trabajo de artesanía que puede durar hasta 50 minutos, buscando cómo iluminar y favorecer las facciones en cada caso. La espera siempre merece la pena.
“Todo en uno”
Nombrar a Gabriel Llano en el barrio de Salamanca es invocar a un peluquero gurú. Tras años como director creativo del salón de Moncho Moreno en la calle Lagasca, por fin ha abierto el suyo propio en Velázquez, 71, lugar que fuera, casualmente, sede del famoso peluquero Ruppert. En él no sólo podrás disfrutar de su maestría realizando el color (es el artífice del rubio -de más a menos platino- de la actriz Ana Fernández, de quien es estilista de cabecera, y del último cambio de look de Andrea Duró) o iluminando los castaños, técnica en la que también es un crack, sino que, además, saldrás perfectamente maquillada. Y es que ‘Gabi’, como le llaman cariñosamente sus cercanos, está de sobra curtido en editoriales de revistas, alfombra rojas y eventos con celebrities.
Tratamientos de alisado (y para curlies)
Con más de treinta años de experiencia a las espaldas, la peluquera Sonia Atanes, a la que puedes encontrar siempre al pie del cañón en su peluquería de Paseo de la Castellana, 247, se ha convertido en toda una referencia en alisados botánicos y taninoplastia (sin restar mérito a sus espectaculares tratamientos para cuidar el rizo natural). La máxima: un respeto total por el cabello. Tras uno de sus alisados -cuenta quien lo ha probado porque mi melena no lo necesita- se nota que al pelo se le ha quitado el encrespamiento y que queda perfectamente sellado (más allá de si se desea más o menos liso). Para cerrar el círculo, Sonia lanzaba este verano SAHB Hair Solutions, productos de alta gama para continuar en casa los tratamientos recibidos en la peluquería. También cuenta con la exclusiva de la firma de colores orgánicos Mounir para toda la zona norte de Madrid.
El rey del balayage
“A partir de los 40 años el color debería ser más claro, pues es cuando la piel comienza a mostrar líneas y signos de expresión. Suavizar los rasgos con reflejos y mechas más claros es un gran acierto”, confiesa este colombiano afincado en Madrid (y con maison propia en Claudio Coello, 57, eje de la milla de oro madrileña). A punto de cumplir las bodas de plata en la profesión, se ha convertido en el más buscado de la capital a la hora de realizar balayage, babylights, ombré, sunlights… que lleva a cabo sin papeles de plata y con una exclusiva técnica de pincel a mano alzada. No hay claroscuro capilar que se le resista y es el favorito de muchas editoras de belleza y directoras de revistas.
Y para mechas en castañas…
Te recomendamos un exclusivo atelier que, haciendo justicia a su nombre, esconde en su ‘taller’ de peluquería un recoleto patio interior en el que evadirse del jaleo de la ciudad. Y ssshhh... sabemos que Maribel Verdú es clienta asidua. Hablamos de Atelier Charo Palomo (C/Maldonado, 33. Ojo porque la puerta es tan discreta que podrías pasarte de largo). Si eres morena y, como yo, estás deshojando la margarita para marcarte unos reflejos, la respuesta está aquí. La clave está, como ellos mismos comentan, en “no convertir a las morenas en rubias”. Para ello, no tocan demasiado las bases naturales y buscan siempre el punto de luz. Resultado: no transforman el color sino que lo embellecen.
Al rescate de la melena
Moncho Moreno saltó de las revistas de moda, donde firmaba espectaculares editoriales, a abrir salón propio (Lagasca, 3 y Velázquez, 76). Experto en tratamientos personalizados, uno de los últimos, Monplex, que han probado la influencer Nat Cebrián o la modelo Alba Carrillo, reconstruye la melena gracias a un sistema multiplicador de enlaces que devuelve la fuerza al cabello. Los cortes también están muy cuidados: suya es la tan comentada melena ‘midi’ de María Fernández Rubíes.
El corte ‘one length’
El Espacio Isaac Salido, en Villalar, 11, en el madrileño barrio de Recoletos, ya merece en sí una visita (más que en una peluquería, parece que una está en un laboratorio creativo). Lo que sorprende es que al corte a priori más simple, como es el one length, Isaac le dedica casi una hora de reloj, porque advierte: “Es el más complicado”. Y es que la razón de ser de un corte de pelo, según este mallorquín afincado en Madrid y admirador de Vidal Sasoon, es que esté realizado con tal precisión que el cliente no necesite pasar por la peluquería y pueda mantenerlo en casa. Damos fe: dura hasta un año.