El verano nos deja con una sonrisa en la boca, relajados y con montones de recuerdos preciosos. Pero no todo es bueno. Con la vuelta a casa no solo nos traemos esto de nuestras vacaciones, también una piel y un pelo muy castigados. De esto último hablaremos otro día. Hoy vamos a centrarnos en el estado de nuestra piel (que ya tenemos bastante).
El sol, el calor, el agua del mar, el cloro de la piscina, la arena... Todo se junta para formar una combinación explosiva que hace que nuestra piel se convierta en la de un lagarto. Es decir, seca y sin brillo. Y, la cara concretamente es una de las zonas que más sufren ya que parece que se queda sin vida durante esta época del año. Nos abandonamos de muchas cosas como la dieta, las preocupaciones o el trabajo y, aunque no deberíamos hacerlo, la mayoría también nos deja mucho en los cuidados faciales. La mayoría de las personas se limitan a cremas solares –otros ni eso–, pero no es suficiente.
Por ello, con la rentrée solemos empezar a darnos cuenta de que es el momento de prestarle a nuestra piel toda la atención que hemos olvidado en verano para recuperar su aspecto habitual (o al menos intentarlo). No existen fórmulas mágicas para ello, pero si algunos productos que se acercan a estos resultados, entre ellos, muchas mascarillas faciales. Te recomendamos que te hagas con un buen arsenal, que empieces a utilizarlas semanalmente y lo tomes como rutina. Para ello, lo mejor es desmaquillar bien el rostro primero, después realizar una exfoliación y, por último, aplicar la mascarilla (ya sea en formato crema o papel) y dejarla actuar. Si te acostumbras a repetir este ritual tu piel lo agradecerá, ¡seguro que lo notas!
Te dejamos una galería con diez propuestas muy distintas con diferentes componentes pero también resultados (antiedad, nutrición...). ¡Ahora es tu turno!