Una buena exfoliación es la base para una piel luminosa y ahora puedes conseguirla con estos exfoliantes caseros. Muchas veces no hace falta recurrir a tratamientos de belleza en cabina porque podemos conseguir buenos resultados con ingredientes naturales que tengamos por casa.

Con la cosmética natural  podemos hacer mascarillas para el pelo (aquí tienes las mejores para pasar de pelo a pelazo) y la cara, y también un sinfín de exfoliantes corporales naturales. ¡Aprende a hacer tus propios exfoliantes caseros!

Exfoliantes: por qué es importante hacerlos y precauciones a tener en cuenta

Pero, ¿qué es una exfoliación? "La exfoliación física consiste en realizar un suave masaje facial con un producto elaborado con partículas de pequeño tamaño con el objetivo de contribuir a una correcta renovación celular", afirma la dermatóloga Alejandra Reolid. El exfoliante sirve para mantener tu piel impecable y también para limpiar y eliminar las impurezas de todo tu cuerpo, además de que mejora su aspecto. Tras una ducha y una buena exfoliación, tu piel estará  lisa, hidratada, suave y radiante. Lo mismo ocurre en el rostro, aunque no es aconsejable utilizar el mismo producto para cuerpo y rostro, ya que la piel del rostro es mucho más delicada y en el caso de usar un exfoliante mecánico -los de grano- requeriremos uno menos agresivo. 

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Y si te preguntas por qué es importante llevar a cabo esta rutina de belleza, el motivo es que elimina las células muertas de la piel, activa la regeneración, y acaba con las impurezas, dejando una piel suave y bonita, el objetivo de cualquiera de nosotros. Con una rutina de exfoliación continua, verás una mejora notable en el aspecto de tu piel.

Beneficios de los exfoliantes:

"Debería ser un paso más en cualquier rutina beauty. "Al ayudarnos a eliminar sebo, queratina, restos de Demodex y residuos acumulados en nuestra piel, desobstruimos el poro, y mejoramos textura de nuestra piel, dejando nuestra piel más suave, y luminosa, unificando el tono", explica la especialista. Y añade un último motivo para exfoliar: "Deja nuestra piel preparada para la posterior aplicación y mayor penetración en nuestra piel de activos de nuestra rutina". 

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Precauciones a la hora de exfoliar la cara

  • Debemos analizar el grano del exfoliante antes de aplicárnoslo en la cara y probarlo en una pequeña zona del rostro para comprobar que no es demasiado grueso para la piel de nuestro rostro.
  • No presiones demasiado, pues tendemos a pensar que cuanta más presión hagamos con el producto sobre el rostro, más células muertas retiraremos, y no es necesario.
  • Si tienes la piel sensible presta especial atención a la selección del exfoliante. Recuerda siempre extender el exfoliante sobre la cara húmeda y después utilizar una buena crema hidratante para calmar la piel tras la exfoliación.
  • " Si nuestra piel está irritada, y nos exfoliamos podría resultar abrasivo", apunta por último la doctora.

Cada cuánto hacer un exfoliante facial

Este punto depende un poco de tu tipo de piel ya que será esta la que te marcará sus necesidades. El exfoliante sirve para retirar toda la materia que se deposita en la piel y puede obstruir los poros. Por esto, en el caso de las pieles grasas en las que la producción de sebo es mayor, puede ser más necesaria que en una piel seca, donde el exfoliante debe ir seguido de una buena crema hidratante para que no reseque la dermis.

La experta aconseja que en el caso de las pieles grasas o mixtas la exfoliación se haga casi diariamente, mientras que en el caso de las pieles secas, con una cada 15 días sería suficiente. "Procesos que supongan una mayor irritación de la piel, post peelings, post láser, procesos de retinización… nos llevarán a bajar la frecuencia de la exfoliación", señala la doctora.

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Ingredientes para hacer exfoliantes caseros

  • Azúcar. Morena, de panela, blanca... sea  del tipo que sea, su textura es ideal para eliminar fácilmente las pieles muertas.
  • Avena molida. Funciona muy bien en las pieles sensibles ya que su textura es más suave.
  • Esencias. Puedes añadir unas gotas esencia (lavanda, menta, vainilla, etc.) o el zumo de medio limón/naranja le dará a tu exfoliante corporal natural un aroma agradable y propiedades astringentes a tu piel. 
  • Aceites. Ayudan a hidratar la piel y son estupendos para dar cuerpo al el exfoliante corporal. Los más usados son el oliva, coco y argán.
  • Sal. Sus granos de sal ayudan a dejar la piel suave, aunque en este caso se puede jugar con diferentes granos y tipos de sal. Si tienes la piel muy sensible, evita usarla.
  • Café. Molido, en el grado que prefieres, te ayuda a exfoliar tu piel y dejarla lisa.

¿Qué pasa si me exfolio la cara con azúcar?

Este es un exfoliante que se ha utilizado desde siempre para mantener la suavidad en el rostro. Estas partículas se mezclan con otro ingrediente de consistencia en gel, como puede ser aceite o yogur, para facilitar la aplicación y se comienza a masajear el rostro con la mezcla. Los cristales de azúcar actúan como partículas exfoliantes y eliminan las células muertas de la piel. Las zonas ásperas de la piel recuperan su suavidad y se estimula la circulación sanguínea.

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Cómo regenerar la piel de la cara rápido

"Una exfoliación física, como hemos comentado nos va a ayudar a librarnos de las imperfecciones, retiramos células muertas, al desunir las células del estrato córneo, otorgando un aspecto más luminoso a nuestra piel", explica la doctora. Pero este no es el único tratamiento que podemos aplicar, ya que existen exfoliantes químicos y tratamientos de láser.

"Los exfoliantes químicos a bajas concentraciones, son generalmente aplicados en la rutina por la noche, como el retinol y los ácidos (alfa y beta hidroxiácidos). A mayores concentraciones, podemos realizar peelings en consulta donde de forma controlada aplicaremos una solución ácida que llevará a cabo la exfoliación y renovación de las capas más superficiales de la piel permitiendo una regeneración de la epidermis y/o dermis superficial". Por último, la especialista añade: "Con determinados láseres en consulta podemos conseguir también acelerar esa renovación celular y conseguir ese efecto buena cara".

 

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Café como exfoliante. Café molido como exfoliante
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Café molido como exfoliante

Agrega un poco de café a una crema limpiadora. Humedece la piel del cuerpo y extiende esta mezcla realizando movimientos circulares. Lávate con agua tibia. Este exfoliante es vigorizante y perfecto para usar por las mañanas en la ducha.

Exfoliante a base de leche y avena
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Exfoliante a base de leche y avena

Mezcla bien 2 cucharadas de leche en polvo y media taza de avena molida. Agrega agua y mezcla los ingredientes. Deja reposar la mezcla por un minuto. Frota la mezcla por el cuerpo con un masaje ascendente y acaba con una buena ducha de agua tibia. Este exfoliante es ideal para pieles sensibles.

Exfoliante casero con azúcar y limón
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Exfoliante casero con azúcar y limón

Un sencillo y eficaz exfoliante casero para la piel es el que conseguimos al mezclar dos cucharadas de aceite de oliva, dos de azúcar y media cucharada de zumo de limón. Aplica la mezcla con movimientos circulares, después deja actuar durante unos 10 minutos y retira con agua tibia. El limón actuará como astringente, así que si tienes la piel grasa, este exfoliante es perfecto para ti.

Almendras dulces
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Exfoliante con aceite de almendras dulces

Calienta aceite de almendras hasta que esté tibio y mézclalo en una taza con dos cucharadas de azúcar moreno de grano grueso. Con una esponja, aplícalo sobre tu piel antes de la ducha y después retíralo con agua tibia y jabón suave. Notarás la piel súper hidratada, suave ¡y con un olor increíble!

Exfoliante de linaza y miel
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Exfoliante de linaza y miel

Para mantener los codos y las rodillas suaves mezcla 1 taza de miel con 1/2 vaso de agua tibia. Agrega 25 gramos de linaza y mezcla. Pon la pasta en el frigorífico tres horas. Frótate los codos y las rodillas con la pasta y déjala actuar por tres minutos. Aclara y ¡listo!