¿Por qué a mi piel le hace falta vitamina C?

"La vitamina C, que es ácido ascórbico, no es lo mismo que el ácido cítrico”, nos dice con insistencia Estefanía Mata de las Heras en un principio. La nutricionista asegura que cuando hablamos de vitamina C, mucha gente piensa que hablamos de un limón o una naranja, y esto no es exactamente así.

La vitamina C es precursora del colágeno a nivel bioquímico. El colágeno es el componente más abundante de nuestra piel y le da forma. Esta presente en un 75%. Por lo tanto, como nos dice Estefanía “si carecemos de colágeno tendremos una piel flácida y descolgada”.

La ingesta diaria de vitamina C recomendada es de 60 miligramos al día. Pero si somos fumadores tendremos que tomar el doble. Además, si estamos haciendo algún tipo de deporte extremo o algo que sea inusual en nuestro organismo, vamos a tener que consumir muchísimo más.

Para comprobar si tenemos un déficit de vitamina C podemos mirarnos las encías. Si nos sangran mucho o si notamos que sangran un poquito cada día, quizá necesitemos incrementar la ingesta de vitamina C.

Cuando la nutricionista se refiere a aumentar la ingesta no se refiere a recurrir a la suplementación, sino a buscar fuentes alimentarias que nos la puedan aportar. La suplementación solo debe ser recomendada por un experto atendiendo a cada caso particular.

Estefanía Mata de las Heras insiste en la importancia de incorporar a nuestra alimentación la vitamina C sobre todo cuando estamos embarazadas porque la piel se estira y el tejido de nuestro abdomen se alarga por la presencia del feto. Cuanto más nutrida esté nuestra piel, mejor.

La vitamina C también es precursora de la elástina. La elástina, como nos confirma Estefanía, no es tan conocida porque está presente en menor proporción en nuestro organismo. Si antes hablábamos de que el colágeno ocupa un 75%, la elástina está presente en un 2% aproximadamente. En cambio, la elástina es también esencial porque sin ella no tendríamos elasticidad en la piel y esta no podría verse tersa.

Estefanía Mata de las Heras nos dice asimismo que la vitamina C es también un potente antioxidante. La oxidación frena la formación de colágeno. En este sentido la radiación ultravioleta es especialmente perjudicial. Lo mismo que el tabaco. Por eso, si somos fumadoras tendremos que doblar la cantidad diaria recomendada de vitamina C (aunque lo más recomendable, obviamente, es dejar de fumar). La vitamina C nos ayuda también a corregir el tema de la hiperpigmentación porque equilibra la melanina en la piel.

La nutricionista, desde el punto de vista del cuidado de la piel, no recomienda la ingesta o aplicación en crema de colágeno sino que insiste en la importancia de incrementar el consumo de ácido ascórbico. Esto ocurre porque, como decíamos al inicio, el último potencia la creación de colágeno en el organismo, lo cual resulta más efectivo.

Preguntada por los alimentos que contienen vitamina C, la nutricionista nos dice que, a pesar de que los cítricos tengan una alta cantidad de vitamina C, lo que más tiene es el perejil. También el pimiento (rojo y verde) tiene una alta concentración de esta vitamina. Mata de las Heras nos cuenta que la vitamina C está presente en general en todas las verduras y pide que “por favor no pensemos que si tenemos un déficit de vitamina C vamos a tener que consumir a todas horas naranjas y limones. ¡Hay muchas otras opciones!”.