Seguro que más de una vez te has preguntado cuál es el secreto de las chicas con la piel perfecta, esas que sin apenas maquillaje tienen un cutis de terciopelo, libre de impurezas, granitos y otras imperfecciones. A pesar de que –como muchos expertos puntualizan– la genética juega un papel importante, no hay que olvidar que mimar la piel con los productos adecuados a cada edad e invertir unos minutos extra cada día en su cuidado puede ser –a la larga– la mejor de las decisiones.
La limpieza facial es una de las partes más importantes en cualquier rutina de belleza y que las coreanas – que de belleza saben un rato– han sabido llevar a otro nivel mediante la doble limpieza.
Pero, ¿qué significa esto de la doble limpieza? Como su propio nombre indica, se trata de una limpieza facial (la que te sueles hacer todas las noches para retirar los productos cosméticos y aplicar la crema antes de acostarte) pero consta de dos pasos para los que también se utilizan dos productos diferentes: uno en base oleosa y otro en base acuosa.
Ambos ofrecen distintas opciones entre las que escoger, el primero suele ser un aceite desmaquillante o un bálsamo que consigue arrastrar toda la suciedad (sudor, maquillaje y otras partículas). En cambio, los productos en base acuosa se presentan en forma de jabones, geles limpiadores o espumas. Estos dos productos aplicados de manera correcta, te dejarán la piel fresquita, limpia en profundidad y con mejor textura.
Limpieza facial en dos pasos
PASO 1
Aplica el producto de base oleosa y masajea sobre la piel seca, incluyendo el contorno de ojos. A continuación, enjuágalo con agua tibia para transformarlo en una leche cremosa hasta que desaparezca por completo. De este modo no solo se consigue desmaquillar la piel y arrastrar toda la suciedad, también queda hidratada gracias a las propiedades humectantes de los aceites del producto.
PASO 2
Es el turno del limpiador facial en base acuosa para hidratar y equilibrar la dermis además, de protegerla de la polución. Para su correcta utilización se aconseja aplicar una pequeña cantidad en la palma de la mano. Después, añadir un poco de agua y enjabonar durante unos segundos hasta que se produzca una ligera espuma. Tras aplicar el producto sobre el rostro y frotar suavemente evitando el contorno de los ojos, puede aclararse con agua.
A continuación, puedes ver un vídeo de cómo se realiza la limpieza y una pequeña selección de productos para que te sirva de ayuda y puedas escoger los que mejor se adaptan a tu piel para realizar tú misma cada noche la doble limpieza facial.